El ministro de las Fuerzas Armadas del Reino Unido, Luke Pollard, participó el fin de semana último de la conmemoración del Día del Recuerdo, una celebración británica en la que se rinde homenaje a los caídos en todos sus conflictos bélicos, incluida la Guerra de Malvinas de 1982. “El Atlántico Sur debe ser una zona de paz, no un territorio de conflicto ni de provocación” – afirmó al respecto el intendente riograndense Martín Pérez.
El último fin de semana, el ministro de las Fuerzas Armadas británicas, Luke Pollard, arribó a las Islas Malvinas para participar de la conmemoración del Día del Recuerdo, en su lengua “Remembrance Day”, una celebración destinada a rendir homenaje a los caídos en todos los conflictos bélicos en los que participó el Reino Unido, incluida la Guerra de Malvinas de 1982.
Pollard, quien ocupa una función equivalente a la de un subsecretario del Ministerio de Defensa del Reino Unido, ratificó la postura histórica del gobierno británico en relación a la soberanía de las Islas Malvinas, indicando de modo tajante que «las islas son británicas» y que el derecho a la autodeterminación de los isleños, quien en 2013 votaron mayoritariamente para seguir siendo territorio británico “está consagrado en la Carta de las Naciones Unidas”. El ministro insistió en que el Reino Unido mantiene su “posición inquebrantable” sobre las islas, aunque expresó la disposición de su gobierno a mantener una “relación productiva” con Argentina en otros ámbitos internacionales como el G-20.
Esta aseveración del funcionario británico fue desestimada de plano por el intendente de Río Grande, Martín Pérez, quien a través de su cuenta de X salió inmediatamente a afirmar: “No puede haber una relación productiva mientras el Reino Unido persista en esta ocupación militarista que viola nuestra integridad territorial”. De este modo el mandatario municipal riograndense hizo referencia al continuo emplazamiento de bases militares británicas en las Islas, que son vistas en Argentina como un símbolo de la persistente ocupación colonial.
La visita de Pollard ocurre además en un contexto muy delicado, tras un incidente reciente en el que el gobierno del presidente Javier Milei emitió un comunicado sobre las Islas Malvinas en el que se utilizó el nombre “Falklands”, en lugar de la denominación soberana “Islas Malvinas”. Esta confusión generó una fuerte reacción en la opinión pública argentina lo que se suma ahora al rechazo por la presencia de un funcionario británico en el archipiélago.
Si bien desde el Gobierno nacional parece haberse optado por el silencio, desde Río Grande la noticia de la visita de Pollard fue recibida con rechazo y denuncias de militarización del Atlántico Sur. Pérez expresó su indignación ante la novedad, calificando la presencia del ministro y del portaaviones HMS Queen Elizabeth, como “una amenaza para la seguridad de la región”.
“Este tipo de gestos sólo profundizan la militarización de las Islas Malvinas y del Atlántico Sur. La presencia de un portaaviones y un ministro de las Fuerzas Armadas confirma la naturaleza militarista del Reino Unido en la región. El Atlántico Sur debe ser una zona de paz, no un territorio de conflicto ni de provocación”, manifestó Pérez.
Cabe destacarse que Pollard también se refirió al plebiscito realizado en las Islas Malvinas en 2013, en el que, según los cómputos británicos, el 99% de los isleños votaron a favor de permanecer como territorio de ultramar del Reino Unido. En su discurso, el ministro enfatizó que la autodeterminación de los habitantes de las islas está protegida por la Carta de las Naciones Unidas y por la Convención de Derechos Humanos.
“El derecho de los isleños a elegir su futuro es indiscutible. Ellos han construido una economía vibrante y han formado una comunidad moderna y diversa”, destacó Pollard, quien agregó que las islas permanecerán británicas “mientras así lo deseen los isleños”.
Sin embargo, el discurso del funcionario no ha logrado apaciguar las tensiones con Argentina. La visita de Pollard coincide con la presencia en las islas del portaaviones HMS Queen Elizabeth, un buque insignia de la Real Marina Británica que ha generado controversia por su simbolismo militarista. La oposición argentina a la visita de Pollard está basada en el continuo rechazo de la Argentina a la ocupación británica y la situación geopolítica en el Atlántico Sur, un área clave para la seguridad nacional.
En cuanto al gobierno argentino, las autoridades mantuvieron un perfil bajo respecto al viaje de Pollard. En una comunicación oficial, fuentes gubernamentales indicaron que la visita era parte de las conmemoraciones anuales del “Remembrance Day” y no se le daba un carácter especial.
A lo largo de su visita, Pollard se reunirá con veteranos de guerra, funcionarios locales de las Islas y líderes comunitarios, quienes han recibido al ministro británico con un programa de actividades en el archipiélago. La visita de este funcionario se realiza a seis años de su primera visita en 2018 y forma parte de la decisión del Reino Unido de consolidar su presencia en territorio usurpado a Argentina.
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