Carmen asegura haber compartido un asado con el ex marino Carlos Guido Pérez y a su esposa María Victoria Caillava en un predio próximo al camping del que desapareció Sofía Herrera. “Mis familiares y amigos me decían `no, no hables, no hables, porque te vas a meter en problemas´, pero no puedo seguir callando” – reveló en Buenos Aires quien dice haber sido en 2008 y en Ushuaia, esposa de un integrante de las Fuerzas Armadas.
Carmen, dialoga con Crónica TV, cubriendo su rostro con lentes y sin proporcionar su apellido: «No hablé antes porque mi familia y amigos me decían que no me metiera en quilombos…».
Una mujer de mediana edad, detrás de lentes oscuros, reveló a los medios capitalinos haber participado de una reunión social con el ex capitán de navío Carlos Guido Pérez y su esposa María Victoria Caillava, hace 16 años. A continuación sus textuales palabras: “Yo estuve en un asado justamente el día que desaparece Sofía Herrera.
Estuve en un predio pegado al camping donde desaparece Sofía Herrera, el 28 de septiembre de 2008. Yo vi frente a mí, comiendo asado, a Carlos Pérez, que era amigo en ese entonces de mi ex, que también era de la Armada. Yo estuve presente en ese camping y vi a Caillava y a Pérez.
Llegué a ese asado porque me invitó Marcelo Ruiz con la señora Kina. Marcelo Ruiz era camarógrafo, el que sacaba fotos para la Armada. Y Kina era la enfermera que trabajaba con mi ex esposo. En ese asado el agasajado era el odontólogo que trabajaba con mi marido, Rafael Ávalos, que estaba cumpliendo años ese día. También estaba su novia de nombre Valesca.
Y bueno, ellos me invitaron porque supuestamente se iba a comer una torta. Yo recuerdo que él estaba cerca de donde se hacía el asado y a ella la vi cuando llegó con otra persona. Yo nunca los vi juntos a ellos dos, así como pareja.
Ella llegó con otro, con un odontólogo que me había intentado sacar una muela y no había podido. Mi esposo era médico de la Armada y no estaba ahí ese día porque se había quedado con los soldados, en campaña. Me acuerdo que cuando salimos del camping, cuando Ruiz me estaba llevando de regreso a mi casa, yo iba viendo en la ruta a policías con perros como buscando algo. Sofía había desaparecido en otro camping del que nosotros estábamos cerca”.
Sobre las razones que la llevaron a guardar silencio durante tantos meses, dado que la desaparición de Loan ocurrió en junio de este año y desde entonces los medios difundieron los rostros de Pérez y Caillava, Carmen respondió: “Cuando vi en la tele el caso Loan, reconocí a Pérez y a Caillava, y recordé que ellos estuvieron conmigo el mismo día que desapareció Sofía. Esos dos rostros están en mi cabeza. Yo los vi a ellos dos en ese evento ahí, en ese camping. Ellos dos estaban ahí.
Y no hablé enseguida porque toda mi familia y mis amigos me insistían en que no hablara, que no me metiera en quilombos, pero yo decidí hablar porque tengo que sacarme esta mochila de encima.
Desde que los vi en la televisión y los reconocí, necesité hablar. Yo no estoy culpando a nadie, pero necesitaba aportar este dato en base a lo que vi. Yo no culpo a nadie, solo sé que yo a esos rostros los vi y justo coincide que el día que desaparece Sofía, justamente coincide con que estaban ellos ahí del otro lado, en el otro camping conmigo.
Cuando vi a Pérez en la televisión me acordé automáticamente que a ese hombre yo lo vi ahí en el camping. Y de ella nunca me voy a olvidar, nunca, porque nos vimos cara a cara.
Yo no la conocía y me acuerdo que ese día cuando entró, no me saludó. Yo era la mujer de un médico y me acuerdo que se limitó a mirarme nomás y no me saludó”.
Finalmente Carmen insiste en que “yo no estoy culpando a nadie. Solo necesito aportar lo que vi, lo que sé, nada más”.
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Diario Prensa
