La licenciada Itatí Antinori habló con AIRE LIBRE FM sobre las graves consecuencias que tiene el personal del Servicio Penitenciario, y de la Policía también, a raíz del recargo de horas en el trabajo y la falta de apoyo psicológico. “Desarmaron el organismo Psicoasistencial para el Personal Penitenciario, y fue un grave error”, sostuvo la psicóloga.
La profesional comenzó señalando que “es bastante complejo responder primero y sobre todo porque si bien yo trabajé mucho tiempo y escuché mucho al personal, no soy penitenciario como de carrera, entonces es como que yo todo lo que te puedo contar no es ni la décima parte de lo que pasa en ellos, es la verdad. En ese sentido mi mi máximo respeto y admiración a mis compañeros tanto de la Penitenciaría como de la Policía de Tierra del Fuego que por ahí tienen problemáticas muy similares, muchas veces yo los asemejo mucho en este sentido porque en ambos está esto de las sobre recargas, el recargo es algo que se hace externo al trabajo y que muchas veces o se tiene que hacer para tener un poquito más de dinero porque muchas veces el sueldo más de las partes como quien dice los más modernos, los que son agentes y demás, oficiales, ingresan con un sueldo que no alcanza, menos si uno tiene hijos, familia. Tienen que hacer muchos sobre recargos, muchas veces están ya sobre recargados de la misma institución a esto se le suma la falta de personal, las condiciones laborales que en general son muy complejas, está desde tener que apagar fuegos, literalmente enfrentarse a un ambiente hiper hostil, de mucha violencia pero no solamente por parte de las personas privadas de la libertad sino que lamentablemente muchas veces esto bueno, esto, tergiversado por las autoridades, está muy naturalizado esto de la violencia en el ámbito penitenciario”.
“Quiero remarcar que que por ahí no son todos, esto me parece como importante también destacarlo porque hoy día se ve como un nuevo -esta es mi perspectiva personal-, un nuevo enfoque de los nuevos oficiales, si bien hay oficiales antiguos que son muy valiosos y que llevan el liderazgo, por ejemplo en Ushuaia, me animo a decir que hay un grupo con un líder que ellos salen a correr, salen a hacer actividades recreativas, donde el líder encargado del área fortalece un montón, contiene un montón digamos, en áreas así como GEAR o cuestiones así, pero es todo esto extralaboral, son realmente líderes comprometidos con su equipo de trabajo cuando hay otros que no. Las máximas autoridades lamentablemente hoy en día no se destacan por esto, tengo que admitir”.
¿Este estrés y factores conllevan a que muchos de estas personas decidan renunciar a sus puestos laborales?
“Sí, no solamente desean renunciar, porque hay algunos que más allá de querer no pueden renunciar, sí, y eso es lo triste también, a ver, por ahí a mí lo que más me preocupa es las situaciones que se veían de parálisis facial parcial.
Muchas veces el personal no se va a quejar, porque ni siquiera puede quejarse o se ve en esa situación de sentirse que no puede hablarlo, sí, pero termina, viste que el cuerpo también se comunica, y hoy día se ve como más esta relación donde hay que abordar un sujeto integralmente, no solamente desde la parte psicológica, desde la parte espiritual, desde la parte social, desde la parte médica, sino como hacer un abordaje más integral, realmente de fondo, y realmente humanitario.
Una perspectiva más humanitaria donde se vea al personal justamente como una persona, sí, no como un recurso humano, los recursos humanos son los recursos que nosotros tenemos, sí, como humanos, pero no son máquinas, son personas, son seres sintientes. Ver ciertas situaciones en las que también esto conlleva y repercute en las enfermedades, lo gastrointestinal, un montón de estos cuadros.
Un montón de insomnio producto del estrés, de los cambios de horario, sí, donde, bueno, a ver, a nivel del sistema nervioso central repercute en el cortisol, en el nivel de cortisol en el cuerpo, lupus… es como que llama la atención, alarman estos cuadros, no? dentro de las enfermedades por ahí que se pueden dar más, ni hablar de hoy día lamentablemente cáncer.
Entonces, yo pido más que conciencia, por ahí algo como más básico, pido empatía para no estar como castigando, hostigando al personal en ese tipo de situaciones”.
¿Qué es lo que sucede cuando el penitenciario decide contactarse con el psicólogo cuando empieza a recibir esta asistencia, comienza a ir a terapias? ¿Cuál es la respuesta que tienen por parte de sus mayores?
“Mira, hoy día me atrevo a decir que lamentablemente no se pueden contactar con un psicólogo porque no hay un psicólogo de asistencia para el personal penitenciario, ese es el gran problema.
El personal tiene derecho, más allá de lo que cualquier otra persona piense, el personal y toda la población, sí, tiene derecho a la salud, por empezar es un derecho, sí, entonces tiene la libertad de, si no se lo brinda el servicio, bueno, hacerlo por fuera, sí, están los CAPS, entiendo que están los CAPS municipales, entiendo que está la parte de gobierno y entiendo que está la parte particular o de obra social, en el caso de OSEF entiendo que es por reintegro, digamos donde un profesional puede brindar asistencia y después facturarle y de esa manera brindándole la factura pueden ir a hacer el reintegro a OSEF, no quiero tampoco explicar mal pero entiendo que hoy día con OSEF es así”.
¿En algún momento hubo ese acompañamiento psicológico dentro del servicio?
“Sí, en un momento sí, de hecho yo estaba a cargo, sí, no fui la única, antes de mí hubieron otros profesionales, excelentes profesionales, que ya hoy en día algunos no están, ya se han jubilado.
Pero la realidad es que hoy día no se, se desactivó, se llamaba Organismo Psicoasistencial para el Personal Penitenciario y ese organismo dejó de existir y lo cual es realmente lamentable.
No estoy para nada de acuerdo en que eso se termine, me parece que tendría que, sí, si no ven la necesidad, a ver, tomar conciencia de que sí es necesario, que sí es importante el personal, que sí es importante su salud y que tiene que haber un personal, no solamente psicólogo, sino médico, hay un montón de necesidades”.
