La ministra de Gobierno e integrante del COE provincial. Dra. Adriana Chapperón, habló sobre las nuevas flexibilizaciones en Río Grande y volvió a apelar “a la conciencia de cada uno”. Aclaró que se tuvo que limitar “la situación de los vuelos” y reclamó que, a pesar de que los pasajes son económicos por tratarse de vuelos humanitarios “no es justo que se aproveche esto para ir a pasear”.
Respecto a las nuevas flexibilizaciones en Río Grande, la ministra sostuvo “las actividades al aire libre son las menos peligrosas, por eso en Ushuaia está permitido el esquí. En esto debemos ir buscando el equilibrio finito. La población está muy cansada de todo este tiempo de aislamiento y aveces es difícil mantener un equilibrio que sirva”.
“A nivel nacional se estableció la prohibición de reuniones sociales porque no podemos controlar las reuniones sociales. Muchos nos preguntan cuál es la diferencia entre reunirme en casa o salir a comer cuatro personas. La diferencia es que el Estado los puede controlar. En casa no podemos controlarlo y es donde no se cumple el protocolo”, dijo por Radio Nacional Ushuaia.
En Río Grande, “las personas hisopadas confirmaban que habían tenido no una sino varias reuniones sociales con distintas personas. Entonces por eso hubo que aislar a tantas personas”.
Consultada por la reunión con infectólogos que forman parte del cuerpo de asesores del presidente Alberto Fernandez, Chapperón indicó “contamos las medidas que tomamos, las que se toman permanentemente, cómo hemos venido trabajando. Ellos nos contaban que los problemas que tenemos y planteamos son los mismos de todo el país. Todos luchamos por encontrar el equilibrio”.
“Los comerciantes tienen una situación muy complicada. Es difícil sobrevivir con tantos meses de parate y, más allá de la apertura de los comercios, el nivel de consumo está caído. Hay negocios abiertos, pero no hay gran nivel de gasto”, asumió.
La ministra fue muy crítica en cuanto al uso indebido de los llamados “vuelos humanitarios”, al señalar “habíamos observado que la gente empezó a salir y volver a Tierra del Fuego en pocos días, lo cual es inadmisible. Al principio salían vuelos hacia Buenos Aires con 30 o 40 pasajeros y los últimos salieron con 130 o 150 pasajeros. Entonces hay que apelar a la conciencia de cada uno. Hoy son económicos los pasajes porque son vuelos humanitarios, pero no es justo que se aproveche esto para ir a pasear. Por eso se tuvo que limitar la situación de los vuelos”.
“A esto se suma que quienes llegan deben hacer el aislamiento de 14 días en un hotel haciéndose cargo de los gastos. Y esto no es fácil. Aún cuando el Estado se hizo cargo, fue muy difícil controlarlo”, agregó.
La próxima medida de flexibilización probablemente sea esta, “que puedan hacer la cuarentena en sus casas, pero será obligatorio que también haga el aislamiento el núcleo familiar conviviente. Por eso pedimos un poco de paciencia y conciencia”.
“Debemos entender que Ushuaia y Tolhuin no están libres de la pandemia. Toda persona que vaya a Río Grande y vuelva deben hacer la cuarentena. Hay que tener muchísima responsabilidad. Hay protocolos muy estrictos para cumplir”, concluyó.
Fuente: SUR 54