En la esquina de las calles Cipriano Reyes y Martín Fierro, en el barrio San Vicente de Paul.
El moderno edificio se levanta en el mismo terreno en donde por décadas funcionó el destacamento Nro. 351 de la Policía de Tierra del Fuego. La ahora demolida dependencia policial operó en una de las casillas de madera fundacionales del barrio, construidas por el fallecido intendente Francisco Restovich, en la década de los 80.
Se inauguró ayer en Ushuaia una nueva dependencia policial en el barrio San Vicente de Paul, que cumplirá funciones de Comisaría de Género, tal cual la que se encuentra actualmente en calle Deloqui y Lasserre. En la oportunidad el gobernador Gustavo Melella y la vicegobernadora Mónica Urquiza, procedieron al corte de cintas para ingresar a las amplias instalaciones que se sustentan en donde se levantaba el destacamento policial Nro. 351, una vieja casilla de madera del conjunto de viviendas fundacionales y construidas por el Municipio de la por entonces capital del Territorio Nacional de Tierra del Fuego. En los años 80 la demanda habitacional comenzaba a ser preocupante por el incipiente asentamiento de fábricas, por lo que el intendente de la época, el radical Francisco Restovich, fallecido, decidió emprender la construcción de casas muy económicas en donde terminaba la ciudad, actualmente el barrio San Vicente de Paul.
Con un presupuesto inicial de 34.860.000 pesos y un plazo de ejecución de 8 meses, la empresa Ambiente Sur Ingeniería SRL fue la encargada de ejecutar el nuevo edificio, el que cuenta con dos plantas de 190 metros cuadrados, oficinas administrativas, una cocina, un ascensor accesible para personas con discapacidad, un calabozo y sector de estacionamiento. La estética de esta nueva comisaría es igual a la de sus predecesoras en el tiempo, la Comisaría 4ta., del barrio Río Pipo y la Comisaría 5ta., Del Valle de Andorra.
Si bien su planificación estuvo en un primer momento orientada a descomprimir la demanda que registra la Comisaría 5ta., cuya jurisdicción abarca el Valle de Andorra, Los Morros, Dos Banderas y gran cantidad de asentamientos próximos, finalmente se le atribuyó el carácter de Comisaría de Género, para atender situaciones de violencia contra la mujer y de índole familiar.
Así lo consideró el gobernador Melella durante la ceremonia inaugural, al afirmar que “todos los actores del Estado, desde el lugar que ocupemos, debemos garantizar el acceso a la justicia real de víctimas de violencia de género. De esta manera reafirmamos nuestro compromiso diario por más y mejor seguridad, apoyo, contención y bienestar de la comunidad fueguina. Esta obra tiene sentido si brindamos un buen servicio, por eso lo mejor de esta Comisaría y -así confiamos que sea – es la atención humana que va a brindar. Quienes lleguen acá, sea mujer u hombre, sufre algún tipo de violencia, por eso lo que más se debe destacar es la calidad y calidez del servicio. Quienes vienen a estos lugares, no deben ser un número de legajo, porque son personas que sufren y que están buscando el acompañamiento de un Estado que las debe proteger. El principal objetivo es brindar un espacio para garantizar la integridad física, psicológica, sexual, económica o patrimonial de las personas damnificadas mediante un trato comprensivo, respetuoso y profesional”.
En la oportunidad, el mandatario reveló una inquietud que planteará próximamente en el ámbito legislativo: “es muy importante garantizar el acceso a la justicia real de víctimas de violencia de género. Por eso tenemos que trabajar en una ley que asegure que quien no tenga el recurso para hacerlo, se la pueda acompañar desde el Estado en el proceso judicial”.
A su turno la titular del Parlamento y vicegobernadora Mónica Urquiza celebró la inauguración al tiempo que informó que el nuevo espacio policial contará con personal policial capacitado, el que trabajará a la par de un equipo interdisciplinario integrado por profesionales psicólogos, abogados, y trabajadores sociales para la atención de todos los casos.
En diálogo con la prensa, Urquiza indicó que la nueva dependencia policial trabajará de manera articulada con la Comisaría de Género del centro de la ciudad y los equipos interdisciplinarios de la fuerza: “la tarea que realizan los efectivos es de carácter vital. Son muy importantes por cómo reciben y atienden a nuestros vecinos que buscan la solución a situaciones de violencia o alguna otra necesidad. Este es el espacio para que se tomen las declaraciones o denuncias, para asistir y acompañar”.
La vicegobernadora coincidió con la inquietud planteada por el titular del Ejecutivo al asegurar que “tenemos una gran deuda desde el Estado porque si bien se hace un gran trabajo desde las comisarías y los equipos interdisciplinarios, lamentablemente es ínfimo el porcentaje de denuncias que llegan a la Justicia. Solo un 3 por ciento de las víctimas tienen acceso a la Justicia y obtienen un resultado. Y aunque la Legislatura ha sancionado varias normas, como por ejemplo la creación de la figura del abogado de niños y adolescentes, y mecanismos de asistencia, acompañamiento y asesoramiento, no es suficiente porque en la práctica se puede ver que no se continúa el proceso judicial. Es ahí donde tenemos que encontrar soluciones codo a codo con los colegios de abogados, con la Justicia y con el Gobierno”.
La flamante comisaría estará a cargo de una mujer, la comisaria Inspectora, Silvia Ibarra y contará con personal policial especialmente capacitado y un equipo interdisciplinario integrado por profesionales psicólogos, abogados, y trabajadores sociales.
Diario Prensa
