La duda fue el disparador de la emocionante entrevista que el equipo de ((La 97)) hizo a Silvana Detzel y el suboficial Leonardo Miranda, encargados Educación en la Unidad de Detención.
La Biblioteca Nacional de Maestros considera que la educación en contextos de encierro constituye un escenario altamente complejo para la política educativa ya que existe el desafío de construir y desarrollar una política universal para esta modalidad del sistema educativo, tal como actualmente establece la Ley Nacional de Educación. Atravesando muchas dificultades para legitimar la existencia de este contexto particular del sistema educativo a partir de la sanción de la Ley.
En este marco desde el equipo de ((La 97)) Radio Fueguina se dialogó con Silvana Detzel, jefa de la división de Educación de la Unidad de Detención 1 de Río Grande, y el suboficial Leonardo Miranda, encargado de la división de Educación, quienes detallaron los pormenores de cómo se aplica la Ley en nuestra ciudad.
El Centro de Educación “Profesor Aldo Abregú” que opera en la Unidad de Detención trabaja durante todo el día, desde las 9 de la mañana hasta las 14:30 horas donde van los alumnos de secundario, luego de 14:30 a 17:30 horas los alumnos de la primaría, y de 17:30 a 22:30 horas los estudios terciarios.
“Dentro de ese día también se hacen otras actividades del centro de formación, voluntariado, gente que se acerca de afuera para llevar adelante proyectos”, detallaron los encargados de la división de Educación. Particularmente destacando el taller de educación emocional para contener a los alumnos.
En lo que hace a la educación formal el Centro de Educación brinda solo los niveles primario, secundario y terciario, pero también desde la división se asesora a los estudiantes para iniciar una carrera universitaria a distancia.
Particularmente en el caso de los terciarios desde el Cent 35 se brindan las carreras de Administración de Empresa y Técnico en Comunicación Social, “este año hubo dos egresados en Comunicación Social”, destacaron.
En este caso particular resalta que se trata de un interno que hizo el secundario en la Unidad de Detención y luego decidió realizar la carrera terciaria, estando pronto a salir en libertad también se inscribió en la carrera de Administración de Empresa.
“No se hace visible este trabajo y las ganas que pone las personas en contexto de encierro, porque en los diferentes niveles tenemos personas más que destacadas”, señalaron los encargados de la división de Educación. Particularmente mencionaron el caso de un alumno que está pronto a egresarse de abogado a distancia y otro alumno que ya ejerce.
“Fue uno de los impulsores que motivo a los demás a tener una profesión”, pusieron en valor.
También en la educación no formal se inició con las capacitaciones que la dirección provincial de Escuelas Técnicas creo con el Centro de Formación ‘Alas de Libertad’, donde se hace la formación de informática, Soldador y Horticultura.
Silvana Detzel y Leonardo Miranda fueron consultados por el nombre del Centro Educativo, por lo que destacaron que fue en honor a un docente que en 2002 empezó a trabajar con el servicio penitenciario, en el área de la primaria. El cual acompañó durante mucho tiempo al Centro hasta que en un viaje a su ciudad natal falleció, por lo que en honor a su compromiso en el año 2015 desde la dirección provincial se sacó una resolución para asignar al Centro Educativo su nombre.
“Es un orgullo porque fue un docente que puso todo el empeño, con mucha empatía hacia los alumnos, dando más que solo lo académico porque inclusive los sábados se acercaba a compartir lo que fortaleció los vínculos con los alumnos”, se enorgullecieron.
El Centro Educativo es una escuela como cualquier otra, con cuatro aulas, una biblioteca y un SUM y para los docentes los internos “son simplemente alumnos, desde el área proyectamos muchas actividades por fuera de lo curricular, así que generamos espacios para que creen vínculos”.
Por ejemplo, en el caso de ‘Alas de Libertad’ se hace foco en que el alumno desarrolle el trabajo en los talleres y puedan llegar a matricularse.
“La idea es que la persona privada de su libertad cuando salga lo haga con una matrícula, trabajamos con eso para que el interno al estar en libertad cuente con herramientas y no haya sido un tiempo en vano”.
“Muchos son adultos o personas grandes que ingresaron a la Unidad y no han tenido la posibilidad de realizar el nivel primario, a algunos les ha tocado empezar desde muy chicos a trabajar”, lamentaron los encargados de la división de Educación.
Sin embargo, hay mucho incentivo desde el Centro para que continúen sus estudios, no solo trabajando desde el área detectando particularidades con la psicóloga de la Unidad o algún jefe del área o suboficial para ver si la persona transita una situación particular de su vida. Sino también mediante un estimulo educativo previsto por la Ley de Ejecución.
Por último, Silvana Detzel y Leonardo Miranda destacaron la labor de los maestros del Centro, ya que “todo esto no sería posible sin la vocación de los docentes”.
FUENTE: RF