COVID-19

La importancia de lavarse las manos no solo en tiempos de pandemia

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Se trata de uno de los principales métodos para prevenir de forma sencilla, rápida y económica cualquier enfermedad, y de esta manera, mantener la higiene como se debe.
El lavado de manos es un método sencillo, rápido y económico para prevenir enfermedades.

Si bien el lavado de manos es una práctica que debería hacerse siempre y en varias ocasiones del día, tiene que potenciarse como una forma de prevenir la llegada del coronavirus, ya que es una de las principales maneras de prevenir esta enfermedad, entre otras, y mantener la higiene como se debe.

Es por eso que los principales organismos internacionales de la salud, como la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS), buscan generar conciencia en la población para evitar no sólo el Covid-19, sino también otras enfermedades cuyos pacientes no tienen edad.

Atención con los niños

De hecho, uno de los principales grupos etarios a los cuales va dirigido en particular son los niños, ya que actúan como agentes de cambio al llevar a sus hogares y comunidades las buenas prácticas de higiene que aprenden en la escuela. Su activa participación y las intervenciones culturalmente sensibles basadas en la comunidad buscan asegurar un cambio de comportamiento sostenido desde los primeros años de vida.

Cabe destacar que el lavado de manos es un método sencillo, rápido y económico para prevenir enfermedades diarreicas, infecciones respiratorias agudas como el coronavirus, infecciones cutáneas y parásitos, entre otras patologías que afectan la salud de millones de personas a nivel mundial y que hoy son portadas de todos los medios.

En tanto, los especialistas indicaron que una correcta higiene de manos debe demandar no más de 40-60 segundos con alcohol en gel o con agua y jabón. Además, plantean que no es suficiente lavarse sólo con agua, ya que se sabe que el jabón es el que permite eliminar la suciedad que contiene los gérmenes que ingresan en nuestro organismo.

Algunas conclusiones

Cabe destacar que existen diversos resultados de investigaciones realizadas en varios países en vías de desarrollo que muestran que la falta de jabón no suele ser una barrera para mantener la higiene, ya que una vasta mayoría de viviendas pobres tienen jabón en el hogar; más bien, el problema es que el jabón raramente se usa para lavarse las manos, sobre todo en ciertas naciones de escasos recursos.

En cuanto a lo que se puede evitar con esta práctica, hay que decir que es una de manera efectiva de prevenir enfermedades diarreicas y la neumonía, que juntas son responsables de la mayoría de muertes infantiles. De hecho, algunos sondeos a nivel internacional indican que cada año más de 3,5 millones de niños y niñas no llegan a celebrar su quinto cumpleaños debido a la diarrea y la neumonía. Además, el lavado de manos también puede prevenir infecciones cutáneas, infecciones en los ojos, parásitos intestinales, SARS, gripe aviar e influenza H1/N1, y trae beneficios a la salud de las personas que viven con VIH/sida.

Finalmente para un correcto lavado de manos hay una serie de recomendaciones para tener en cuenta, como por ejemplo: mojarse las manos con agua de red o potabilizada, enjabonarse (cualquier jabón sirve para eliminar los gérmenes), frotar muy bien las manos, incluyendo muñecas, palmas, dorso y entre los dedos, enjuagar con abundante agua y secarse con una toalla limpia, papel descartable o agitando las manos