«No fue difícil. Créanme, ni siquiera calenté», sostuvo Zarko Pejanovic.
Zarko Pejanovic ganó con comodidad la 12ª edición anual del «Campeonato de estar Acostado» en el pueblo de Brezna, en Montenegro.
Conocido como «Knele», el hombre se alzó con la corona tras permanecer tubmado 60 horas.
El torneo se desarrollo al aire libre, a los pies de un gran árbol. Los competidores tenían un colchón, mantas y celulares u otros dispositivos para entretenerse.
En total 10 personas participaron de la prueba en la que se les permitió a los concursantes ir unos minutos al baño cada 8 horas.
«No fue difícil. Créanme, ni siquiera calenté», sostuvo Pejanovic, quien se hizo acreedor del premio de 350 euros, una comida para dos personas, una estancia de fin de semana en un hotelito rural y una experiencia de rafting.
Más tarde el campéon fue detenido por la Policía por intentar agredir a unos periodistas y vandalizar la redacción de un periódico que lo tildó como «el mayor estafador de todo Montenegro».
El récord del concurso lo tiene Dubravka Aksic, una mujer que logró pasar 117 horas – cuatro días y 21 horas- acostada boca arriba.
Antes de que se implementara la norma de poder ir al baño, la marca máxima era de 52 horas.
