El macabro episodio tuvo lugar en el estado de Kansas. Hace 67 años que una convicta no era ejecutada bajo el sistema penitenciario estadounidense.
Este 8 de diciembre las autoridades yanquis ejecutarán, mediante una inyección letal, a Lisa Montgomery, en el centro penitenciario Terre Haute, en el estado de Indiana. Se trata de la primera convicta ejecutada a nivel federal de los Estados Unidos, desde 1953.
Montgomery mató en diciembre de 2004 a Bobbie Jo Stinnett, una joven embarazada de 23 años, en la ciudad de Skidmore, en Misuri. La asesina no solo le quitó la vida estrangulándola, sino que también le abrió el vientre con un cuchillo y secuestró al bebé que yacía en su interior.
Asimismo, condujo desde su casa en Kansas a la casa de la víctima bajo el pretexto de adoptar a un cachorro. Al llegar al lugar utilizó una cuerda para asfixiar a la piba, que transitaba un embarazo de ocho meses.
Stinnett permaneció consciente e intentó defenderse de su atacante, hasta que esta tomo el objeto punzante con el que cortó el útero, del que sacó a la criatura. Tras quitar a la niña, Montgomery se la llevó e intentó hacerla pasar por su hija.
La condena que le valió la inyección letal
La mujer admitió la culpa y fue condenada a muerte en 2007. La nena que había secuestrado, Victoria Jo, fue criada por su padre y ahora tiene 16 años.
Los abogados de la asesina argumentaron que padecía delirios cuando mató a Stinnett, pero su postura fue rechazada por la corte. También afirmaron que sufría de pseudociesis, trastorno que se da cuando una mujer cree falsamente que está embarazada y presenta signos externos de embarazo.
La última vez que en EE.UU. se llevó a cabo una ejecución de una mujer a nivel federal fue en diciembre de 1953. Se trató de Bonny Brown Heady, condenada a muerte por secuestrar y matar a un heredero de seis años de un magnate, dueño de una serie de concesionarios de vehículos Cadillac. La ejecutaron en una cámara de gas junto con su novio.
Sin embargo, a nivel de estados las ejecuciones de las presas continuaron después de aquel año y hasta 2015 en EE.UU. ejecutaron a una veintena de mujeres, en la mayoría de los casos mediante la inyección letal.