El virus continúa expandiéndose y varios países decidieron volver a poner ciudades en aislamiento. Una nueva cepa en Corea del Sur encendió las alarmas.
Con contagios que no ceden en los países más afectados y rebrotes que preocupan cada vez más a aquellos que creían haber superado lo peor, la pandemia del nuevo coronavirus volvió a establecer la necesidad de revisar la reapertura en varias naciones y a poner en riesgo o a modificar las condiciones de procesos electorales y tradicionales celebraciones religiosas.
Además, se halló una cepa del nuevo coronavirus que actualmente se está propagando en Corea del Sur tiene su origen en Europa y EE.UU., y es seis veces más infecciosa que la original que surgió en China, informan medios surcoreanos.
El GISAID, iniciativa internacional para compartir secuencias del genoma de los virus operada por la Organización Mundial de Salud (OMS), clasifica el SARS-CoV-2 en seis cepas: S, V, L, G, GH y GR. En China, donde se originó el nuevo coronavirus, prevalecieron los clados S y V.
El mundo acumulaba ya más de 11,32 millones de casos confirmados y 532.340 muertes por la enfermedad, según el parte diario de la Organización Mundial de la Salud (OMS), o más de 11,57 millones de contagios y 536.658 fallecimientos, según reportaba esta tarde la base de datos en línea de la universidad estadounidense Johns Hopkins.
El aumento de los contagios no cesaba en los tres países más castigados, respectivamente Estados Unidos (más de 2,93 millones), Brasil (más de 1,62 millones) y ahora India, que con 697.413 dejó atrás a Rusia, que contabilizaba 686.777.
En Estados Unidos, además, se superó la barrera de las 130.000 muertes por Covid-19 y autoridades de los estados sureños Florida y Texas advirtieron que sus sistemas sanitarios estaban al borde del colapso, mientras expertos manifestaron temor a que aumenten los contagios y las muertes luego de que el sábado, Día de la Independencia, hubiera celebraciones masivas alentadas por el presidente Donald Trump.
En Brasil, pese al acelerado aumento de los contagios, la ciudad de San Pablo -la más afectada del país- entró hoy en la tercera fase de flexibilización de la cuarentena y el presidente Jair Bolsonaro vetó la ley destinada a obligar al uso de barbijos en las cárceles, igual que hizo la semana pasada con la norma que lo imponía en comercios, iglesias y escuelas.
Pero la noticia más impactante la dio el propio Bolsonaro, que tantas veces calificara al coronavirus como una «gripecita», al revelar a la televisora CNN Brasil que tenía fiebre y otros síntomas compatibles con Covid-19.
A esas preocupaciones se sumó la originada por la cantidad cada vez mayor de países que habían reiniciado total o parcialmente sus actividades después de haber superado el pico de contagios y en los que, sin embargo, en los últimos días se detectaron rebrotes que encendieron alarmas y motivaron la vuelta de algunas restricciones.
Uno de esos casos es el de España, que sumó hoy dos nuevos pequeños brotes en el sur del país y computaba 47 brotes activos, mientras cerca de 300.000 personas se encontraban confinadas en el norte, en una zona costera de Galicia y en el interior de Cataluña.
En Galicia, además, la prensa local manifestó incertidumbre acerca de la realización de las elecciones regionales previstas para el domingo próximo, en las que el presidente de la comunidad autónoma, Alberto Núñez Feijóo, es favorito para ser reelecto.
Las autoridades decretaron este martes un nuevo confinamiento de los habitantes de Melbourne, la segunda ciudad más poblada de Australia, con unos cinco millones de habitantes, para frenar la expansión del nuevo coronavirus.
El confinamiento curará al menos seis semanas, declaró el primer ministro del estado de Victoria, Daniel Andrews. «No podemos fingir» que la pandemia de covid-19 terminó, agregó al explicar la decisión.
El anuncio del confinamiento se produjo después de que se divulgara que en las últimas 24 horas hubo 191 nuevos casos de Covid-19 en la ciudad.
También en Bolivia fueron puestas en duda, en este caso desde el propio gobierno, las elecciones generales previstas para el 6 de septiembre tras ser aplazadas desde el 3 de mayo precisamente por la pandemia.
La ministra de Salud, Eidy Roca, afirmó en un video que «el Comité Científico asesor del Ministerio de Salud, que está integrado por un grupo plural de profesionales, debe ser el que, en función de las informaciones técnicas», sugiera la fecha más propicia para efectuar los comicios.
Uno de los candidatos presidenciales, el médico y pastor presbiteriano Chi Hyung Chung, informó hoy en Twitter que dio positivo de coronavirus, un día después de que el gobierno informara que el ministro de la Presidencia, Yerko Núñez, había sido internado con «complicaciones» derivadas de su diagnóstico de Covid-19 y que la propia Roca y el ministro de Trabajo, Oscar Mercado, también fueron contagiados.
Por otra parte, hoy falleció el diputado nacional Julio Jiménez y, aunque hasta esta noche no se había confirmado la causa, varias fuentes recordaron que hace pocos días había tenido síntomas de coronavirus.
La pandemia no fue obstáculo para que ayer se celebraran elecciones generales en la República Dominicana -el país con más contagios y muertes en Centroamérica y el Caribe- y municipales en Tokio, en medio de un rebrote detectado en los últimos días en Japón, pero las eventuales consecuencias sólo podrán medirse dentro de dos semanas.
Mientras tanto, Arabia Saudita anunció hoy una serie de protocolos especiales para la tradicional peregrinación a La Meca, el principal sitio sagrado del Islam, que no se suspenderá por la pandemia pero incorporará esta vez el uso obligatorio de tapabocas y de piedras esterilizadas para el rito en que se apedrea simbólicamente al demonio.
Asimismo, los peregrinos -que estarán obligados a guardar distancia social y no podrán tocar ni besar la Kaaba- deberán tramitar un permiso especial y no podrán iniciar la marcha, que se realizará entre el 28 de este mes y el 2 de agosto, si tienen síntomas de Covid-19.
Otro de los países que retrocedieron luego de habilitar actividades es Israel, que hoy resolvió cerrar bares, clubes y gimnasios, así como suspender los actos culturales y restringir la asistencia a sinagogas, después de haber verificado en los últimos días un repunte de los contagios de coronavirus.
«La plaga está extendiéndose, los números crecen abruptamente cada día y, con ellos, la cifra de pacientes gravemente enfermos; si no actuamos ahora, tendremos cientos o quizá miles de pacientes graves en las próximas semanas», dijo el primer ministro, Benjamin Netanyahu, en la reunión de gabinete de esta mañana, según el diario The Jerusalem Post.
En tanto, en Italia, que registró hoy el segundo día consecutivo con menos de 10 muertes por coronavirus, el gobierno informó que estaba diseñando un plan para contener a las personas contagiadas que lleguen al país tras la reciente reapertura de las fronteras terrestres y aéreas en buena parte de Europa.
«Los datos nos dicen que hemos ganado muchas batallas, pero para ganar la guerra tenemos que detener todas las cadenas de transmisión», justificó el viceministro de Salud, Pierpaolo Sileri.
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