Una persecución, choque, pelea y un hurto se produjo en la ciudad de Ushuaia en la calle Antonio Romero 577, frente a la Comisaria Primera.
Allí un automóvil Peugeot 206, de color negro, dominio JBK 173, conducido por Ramiro Ángel Agustín Colantuono, de 18 años de edad, quien era acompañado por otro joven, subió a exceso de velocidad y en contramano por la calle Romero desde Magallanes, en su recorrido impactó de costado con un rodado Volkswagen Surán estacionado, propiedad de una vecina de la cuadra, Gisela Sibadón, de 35 años de edad y a una camioneta de color blanco, estacionada sin ocupantes.
Inmediatamente detrás, en franca persecución, un automotor Nissan March, de color gris, chapa patente AB797 QO, conducido por Wenceslao Germán Age Wehr, de 40 años de edad, acompañado por otro sujeto adulto, tambien subio en contramano por la calle Antonio Romero, impactando de lleno al Peugeot en la puerta lateral derecha.
Rápidamente el conductor Age Wehr bajo del vehículo junto a quien lo acompañaba y se abalanzaron sobre los ocupantes del Peugeot. Del lado del acompañante logro escapar corriendo un joven que rápidamente se perdió de vista mientras que el conductor del Peugeot de apellido Colantuono, no tuvo la misma posibilidad: Age Wehr le pegó cuatro trompadas mientras lo insultaba sin que se pudiera entender qué es lo que estaba ocurriendo, a las puertas de la dependencia policial.
Un vecino intervino intentando separarlos, pero quien acompañaba al conductor del Nissan March, creyendo que esa persona era quien acompañaba al joven en la huída, la emprendió también contra él a golpes de puño.
Finalmente, los efectivos policiales tomaron cartas en el asunto advirtiéndole a los violentos sujetos que serían detenidos si persistían en su actitud, mientras ocurria otro hecho poco claro:
De repente el conductor del Peugeot 206, Ramiro Colantuono, ante la vista de un efectivo, agarró un teléfono celular y se lo guardó en el bolsillo, diciendo que era de su propiedad.
Simultáneamente, a metros de distancia, el conductor del Nissan March, Wenceslao Age Wehr, iluminaba el suelo debajo del Peugeot de Colantuono, diciendo que se le había perdido un celular con las mismas características que el muchacho acababa de decir que le pertenecía.
Debido a ello, los policías procedieron a la aprehensión de Colantuono, imputado en flagrancia por hurto.
Momentos más tarde personal de la Dirección Municipal de Tránsito procedió al secuestro del Peugeot, sin que trascendieran por el momento las razones, ni los motivos que determinaron esta persecución que terminó a las trompadas.
Fuente: Crónicas Fueguinas