Una pareja estadounidense alquiló una habitación de su casa, fueron a su noche de bodas y cuando regresaron se encontraron la peor sorpresa en el medio del living.
Un hecho impensado le ocurrió a una pareja estadounidense que suele alquilar algunas habitaciones de su casa con el fin de tener un ingreso extra, pero en esta ocasión las cosas se salieron de control cuando volvieron de su noche de bodas y su historia no tardó en volverse viral.
Se trata de Justine Smith y Francisco Peres, quienes se habían ido a la celebración de su boday cuando regresaron a su hogar no se esperaban lo que iban a encontrar: había un grupo de jóvenes que estaba teniendo una orgía en su living.
Todo se dio cuando la pareja se olvidó de cancelar las reservas en la semana de vísperas de Año Nuevo, por lo que otra pareja pidió uno de los cuartos para pasar la noche que coincidía con el día de su boda. Aunque no estaban muy seguros, decidieron acceder ya que necesitaban el dinero.
Lo que habían planeado Justine y Francisco para ese día era regresar a su casa tras de la celebración, ya que iba a ser un momento intimo y los invitados no superaban las 20 personas. Cerca de las 2:30 de la madrugada, los recién casados se fueron a su habitación para descansar, pero no los dejaban dormir uno ruidos que provenían del cuarto de los inquilinos.
Volvieron a su casa tras la noche de bodas y se encontraron una “sorpresita” en medio del living: “Las cosas se salieron de control”
“No queríamos decir: ‘Hey, ¿no podés hacer eso?’ Simplemente no parecía que valiera la pena”, confesó Justine en diálogo con The Sun. Sobre eso, la mujer reveló que vio que los jóvenes estaban aspirando cocaína en el living.
La pareja contó que la situación empeoró y se sorprendieron por lo que pasó después
La pareja dueña de la casa dijo que decidieron dejar pasar la incómoda situación, pero todo empeoró de un momento a otro. Al rato, los escucharon teniendo relaciones sexuales y habían invitado como mínimo a tres personas más.
“Definitivamente podemos escucharlos, y simplemente no valía la pena pedirles que por favor no tuvieran sexo en nuestro sofá”, relató Smith.
A la mañana siguiente, se encontraron un caos en su casa, ya que había dos personas desconocidas durmiendo en su sillón con bolsas de cocaína y otra persona en la habitación que estaba alquilada. “Dijeron que las cosas se salieron de control. Ni siquiera estamos seguros de cuál era su relación con las otras personas, si eran amigos o simplemente personas que conocieron mientras estaban fuera”, contó la pareja.
Asimismo revelaron que cuando el grupo de levantó comenzaron a limpiar el departamento y dejaron todo en orden. Luego, les dejaron una nota: “Perdón por ser tan malos invitados. No tenemos excusas para nuestro comportamiento”.
“Nuestra relación con la alfombra nunca volverá a ser la misma”, mencionó irónicamente la mujer. De todas formas, desde la aplicación de Airbnb cubrieron los gastos por las molestias ocasionadas.