En Estados Unidos, un padre le inyectó sangre con VIH a su hijo para no mantenerlo. La víctima sobrevivió y contó su historia.
La impresionante historia tuvo lugar en Missouri, Estados Unidos. Allí, un hombre le inyectó sangre con VIH a su hijo de 11 meses porque no quería pagar la manutención.
El sobreviviente y protagonista de esta historia se llama Brryan Jackson. Desde que es un bebé está infectado con VIH por culpa de su padre.
De acuerdo a su relato en una entrevista que le concedió a la BBC, todo comenzó cuando su padre Bryan Stewart volvió de la Guerra del Golfo. Aunque había presenciado el nacimiento de su hijo antes de irse y estaba muy emocionado, cuando volvió todo fue diferente.Stewart no reconocía a su hijo y le exigía a su pareja una prueba de ADN. Luego de un tiempo se volvió violento con la madre de Brryan y finalmente terminaron separándose en 1992.Sin embargo, lo más grave ya había ocurrido antes de la separación. Cuando el bebé tenía solamente 11 meses, tuvo que ser internado por un ataque de asma.
En ese escenario y mientras la madre de Brryan lo dejó solo con Stewart durante unos minutos, se dio el escalofriante hecho. El padre, aprovechando su empleo de auxiliar médico y la posibilidad de manipular sangre, había tomado una muestra infectada con VIH.Aprovechando que nadie veía, se la inyectó a su hijo, esperando que muera para no tener que mantenerlo. Incluso, en peleas con la madre de Brryan la había amenazado diciendo que su hijo no pasaría los 5 años.Luego de mucho tiempo sin poder conseguir un diagnóstico acertado, en 1996 la doctora Linda Steel Greendescubrió que el niño tenía SIDA y que solo le quedaban algunos meses por el estadio avanzado de la enfermedad.A pesar del complicado pronóstico Brryan logró sobrevivir y hoy se encuentra en buen estado de salud, conviviendo con la enfermedad. Su padre fue condenado a cadena perpetua en 1998 y él decidió agregarle una letra a su nombre y tomar el apellido de su madre, dado que antes se llamaba igual a su papá.
Fuente Mitre.