Un hombre trans residente en Puerto Madryn, Chubut, se convertirá este año en el primer padre gestante de mellizos en Argentina. Ya cursa la semana 33 de gestación y se prepara para el nacimiento de sus bebés, que será en agosto.
«El embarazo lo he llevado muy bien. Estoy muy contento porque me vienen tratando muy bien les mellis», contó Ian Rubey, un biólogo de 31 años, al sitio ADN Sur de Chubut.
«En la semana en la que estoy, todavía me muevo, ando; la estoy pasando re bien», agregó con entusiasmo.
Ian tiene planeado amamantar a sus «mellis», que podrían nacer por cesárea o parto vaginal. «No lo sabré hasta último momento», convino sobre la llegada al mundo de Manuel Amaranto y Yanal Almendra.
Originalmente de Buenos Aires, Ian se mudó a Puerto Madryn cuando tenía 18 años y ahí armó su vida. También atravesó su transición y es uno de los creadores del Espacio Trans en esa ciudad de Chubut.
Hasta antes del embarazo la rutina de Ian incluía inyecciones de testosterona cada tres meses, pero lo suspendió para que su aparato reproductor volviera a funcionar como antes de la transición.
Volver a tener el ciclo menstrual «no fue un problema porque mi identidad de género masculina ya estaba muy arraigada», explicó a Infobae esta semana. Para ese entonces había visto en redes sociales los casos de padres gestantes en España y Puerto Rico que lo habían inspirado.
«Después de expresar mi identidad de género y vivir como un varón, empecé a pensar la posibilidad de tener hijos a través de la gestación», contó al diario El Chubut.
El camino a la identidad de género masculina de Ian empezó en los noventas, cuando el resto del mundo todavía lo veía como una niña y a los 15 años le contó a su mamá que era lesbiana.
Pero su salida del clóset «fue todo un drama» para su madre, que lo criaba sola mientras trabajaba en hospital de rehabilitación «Manuel Roca» de la Ciudad de Buenos Aires.
«Sentí que estaba lastimando a alguien muy importante para mí. Así que a partir de ese momento dejé de lado todo lo que me pasaba e intenté feminizarme lo más que pude», recordó Ian en las entrevistas recientes.
El tiempo se aseguró de acomodar los tantos para Ian, que a los 27 años entendió que su identidad de género es masculina y empezó su transición.
Con 31 años y poco antes de dar a luz, expresó: «Yo voy a ser papá, un papá gestante».
La aclaración es válida porque, por ejemplo, tuvo que explicar en la obra social que era soltero y quería quedar embarazado por inseminación artificial cuando la empresa sólo aceptaba cubrir los tratamientos a parejas o personas con problemas de fertilidad.
El primer caso de padre gestante en Argentina se registró hace varios años en la ciudad de Victoria, Entre Ríos, pero el de Ian es el primero de mellizos.