Ocurrió en avenida Perito Moreno.
El domingo 22 de mayo a aproximadamente las 7 de la mañana, un conductor que circulaba de manera errante terminó por subirse a un divisor de carriles, siendo justo observado por efectivos policiales que se desplazaban por el lugar a bordo de un patrullero de la Comisaría 3era., en recorrida preventiva.
Un automóvil Toyota Etios, de color gris, manejado por Adriel Ian Ariaudo, de 23 años de edad, terminó su marcha montado sobre el cordón de cemento que divide los carriles de avenida Perito Moreno, frente al supermercado La Anónima.
Al acercarse a hablar con él, bajo una copiosa lluvia, los policías percibieron que el sujeto emanaba un fuerte aliento etílico, convocando en consecuencia a inspectores municipales para que se hicieran presentes con el dispositivo detector de alcohol en sangre. Cuando momentos más tarde Ariaudo sopló la pipeta del alcoholímetro, éste arrojó un resultado positivo nada menos que de 2,98 g/l.
Al solicitársele la documentación de rigor, el conductor tampoco pudo exhibir la licencia habilitante, por lo que los inspectores dispusieron el incautamiento de su vehículo y el traslado al playón municipal.
Ariaudo fue trasladado por los uniformados a la guardia del nosocomio en donde le realizaron el control médico de rigor, para inmediatamente después convocar a un familiar a fin de entregárselo en guarda, ya que la Policía no realiza más detenciones por esa causa.
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Diario Prensa