El miércoles se conocerá el veredicto en el juicio que tiene como imputado a un portero acusado de abuso sexual gravemente ultrajante de una niña de 6 años.
Los supuestos hechos ocurrieron entre 2013 y 2015 y fueron denunciados en 2017. Al imputado se lo acusa de haber violentado sexualmente a la hija de un docente mientras éste dictaba clases y de corromperla haciéndole ver material pornográfico.
En la etapa de alegatos realizada en el ex campamento de YPF, sede del Distrito Judicial Norte, hubo planteos diametrálmente opuestos en cuanto al veredicto que podría producirse el miércoles próximo en torno al juicio que tiene como imputado a un portero de la escuela Nro. 2.
El fiscal Jorge López Oribe efectuó su alegato en primer término ante el Tribunal de Juicio que desde la semana pasada lleva adelante el juicio al portero Celestino Demartini, seguido luego por el defensor Eduardo Tepedino.
El titular del Ministerio Público Fiscal pidió a los magistrados que condenen a 10 años de prisión al acusado dado que, según su criterio, está demostrado que incurrió en el delito de “abuso sexual gravemente ultrajante en concurso real con exhibición de pornografía y corrupción de menores agravada”, en perjuicio de una niña de 6 años.
Por su parte Tepedino requirió a los jueces que por el contrario, se absuelva de inmediato a su representado, por estimar que no existen pruebas suficientes para acreditar la comisión de los delitos que se le enrostran al empleado del establecimiento educativo. Tepedino apuntó al hecho de que la niña nunca identificó fehaciéntemente a Demartini como su agresor sexual y también a que las pericias tecnológicas no lograron demostrar que el video pornográfico que la nena recibió en su aparato de telefonía celular, haya sido enviado desde alguna cuenta de la persona juzgada. El defensor agregó también para reforzar su planteo de inocencia, que según él, en una escuela y en horario escolar resulta improbable que se cometan hechos como los analizados debido al constante tránsito de docentes y alumnos.
Cabe destacar que Celestino Demartini arriba a su enjuiciamiento en goce de libertad pero apartado preventivamente de sus funciones.
El expediente
Los hechos que se consignan en el expediente judicial dan cuenta que los padres de la niña presuntamente abusada se percataron de que alguna situación anormal estaba ocurriendo con ella cuando una noche descubrieron que alguien había enviado al teléfono celular que utilizaba la nena, material pornográfico. A ello se sumaron conversaciones con la niña, quien refirió que el portero de la escuela “hacía cosas” mientras ella esperaba en pasillos y aulas que su padre terminara de dar clases, para regresar juntos a la casa.
Los jueces Eduardo López, Natalia Buitrago y Ricardo Locatelli le darán a Demartini, antes de hacer conocer su veredicto, la posibilidad de dirigirse a ellos, tal como ocurrió en la primera jornada del juicio, en la que se negó a declarar. En esa ocasión y ante su silencio se procedió a leer lo que dijo en la etapa de instrucción, negando los cargos que se le endilgan.
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Diario Prensa
