La Cámara de Apelaciones dijo que la Justicia “se equivocó” al dar lugar a los querellantes de apelar un fallo que – a su criterio – ni debió ser revisado.
Los camaristas Julián de Martino, Jorge Jofre y Federico Vilella resolvieron dejar firme la absolución que dictó el juez de Instrucción Nº 2, Raúl Sahade al gobernador Gustavo Melella y lo exculparon de las denuncias impulsadas por los empleados de la construcción Suasnavar, Lobera y Rivas. Los tres dijeron haber sido abusados sexualmente por el ex intendente de Río Grande a cambio de trabajo y de pago de facturas de obras realizadas, en 2018.
En las últimas horas se conoció la decisión de la Sala Penal de la Cámara de Apelaciones, integrada por los camaristas Julián de Martino, Jorge Jofre y Federico Vilella, la que consideró “erróneamente concedido” el recurso de apelación a la querella que representaba el abogado Francisco Giménez en contra del fallo en primera instancia que había dictado la absolución del actual gobernador por los casos de abuso sexual por los que había sido acusado.
De esta manera, el fallo que lleva la firma de De Martino, Jofre y Vilella deja firme la absolución que dictó el juez de Instrucción del Distrito Judicial Norte Nº 2, Raúl Sahade en beneficio del gobernador Gustavo Melella, quien al momento de los hechos denunciados era intendente de la ciudad de Río Grande, liberándolo de toda responsabilidad en los tres casos denunciados por abuso sexual, por los obreros de la construcción Damián Rivas, Jerónimo Alfredo Suasnabar y Mario Lovera.
En su fallo, los jueces señalan que la “existencia de una marcada falta de coherencia interna en el relato” de Jerónimo Alfredo Suasnabar, “lo cual resta credibilidad a su exposición y se proyecta como una duda despejada hacia el futuro”.
Para los magistrados “esa situación, consecuentemente priva de sentido a la continuidad de la investigación sobre el segmento analizado”.
Según el abogado patrocinante, Federico Giménez, el fallo será apelado ante una instancia superior, ni bien regrese a la provincia, dado que se encuentra actualmente de viaje.

Los hechos
La comunidad fueguina se enteró a través de la publicación de un medio periodístico capitalino – Infobae – en octubre de 2018, que el por ese entonces intendente de la ciudad de Río Grande y candidato a gobernador de la provincia, Gustavo Melella estaba imputado en una denuncia por supuestos “favores sexuales” a cambio de empleos en la construcción y el cobro de trabajos realizados en obras del Municipio de Río Grande.
Los denunciantes, hombres adultos todos de más de 55 años de edad, dijeron haber realizado trabajos que después facturaban a empresas contratistas del Municipio sin que en realidad hubiera habido ninguna contraprestación.
El contenido de la causa y las declaraciones de los tres denunciantes, Damián Rivas, Jerónimo Alfredo Suasnabar y Mario Lovera se conoció junto a varios audios supuestamente intercambiados vía WhatsApp entre los albañiles y el por entonces intendente, además de otra profusa documentación bancaria.
Las actuaciones judiciales avanzaron hasta la imputación al jefe comunal por el delito de “abuso sexual coactivo” por parte del fiscal mayor Guillermo Quadrini, pero el juez Sahade nunca citó al mandatario a prestar declaración indagatoria.
Ante las denuncias que rebotaron en todos los medios provinciales y nacionales, Melella negó siempre los cargos y atribuyó los hechos a cuestiones “políticas” y “electorales” y a un enfrentamiento con la actual diputada Rosana Bertone, quien en aquella época era gobernadora provincial. El tiempo transcurrió y en diciembre de 2019 Melella sucedió en el cargo a Bertone, asumiendo la titularidad del Ejecutivo fueguino.
Luego de esa asunción, el caso pareció haber caído en el olvido hasta que tres años después, el juez Sahade falló a favor de la inocencia de Melella, el que fue inmediatamente apelado por al parte querellante. Esa apelación es la que ahora la Cámara dice que se “concedió erróneamente”.
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