Es el resultado que arrojó, en chicos de 5 a 7 años, el Programa Municipal de Salud Visual que se llevó a cabo en Río Grande. Oftalmólogos constataron que el 55% de ellos requiere el uso de lentes.
Un preocupante índice del 55% de los niños riograndenses de entre 5 y 7 años con alguna alteración visual e indicación para usar lentes, arrojó como conclusión el Programa Municipal de Salud Visual que finalizó este fin de semana.
Así lo confirmó por ((La 97)) Radio Fueguina la secretaria de Salud del municipio de Río Grande, Eugenia Cóccaro, quien reveló que se eligió evaluar a chicos de esa edad porque es cuando madura su visión. Se trata de la etapa más importante para determinar si hay alguna alteración visual y evitar así consecuencias futuras en su desarrollo.
La funcionaria reveló que sólo este sábado, de los 400 niños inscriptos para el chequeo por parte de oftalmólogos y ópticos de la órbita municipal, más de 200 presentaron algún tipo de anomalía visual. Incluso muchos de ellos ya tenían la indicación de receta de lentes.
“Entendemos que el acceso al servicio de oftalmología en el sector público es muy escaso y difícil para muchas familias” justificó Cóccaro.
En evaluaciones de años pasados, por lo general de los niños atendidos en un servicio oftalmológico, entre un 30 y un 35% presentaba alteraciones de algún tipo en su visión. Siempre tratándose de niños de la franja etaria entre los 5 y los 7 años de edad.
“Estamos viendo que está aumentando su porcentaje en este momento” remarcó la funcionaria, quien esbozó una explicación al respecto: “Durante los dos años de pandemia, los chicos estuvieron mucho tiempo bajo las órbitas de las pantallas de celulares, computadoras y tablets, por la educación virtual que tuvieron que tener. Eso puede llegar a ser un factor que potenció las alteraciones”, además de mencionar las condiciones climáticas de la isla como posible factor contributivo para ese incremento.
Además, durante el desarrollo del programa municipal se constató que más de 60% de las familias de los chicos examinados no tiene obra social que les brinde cobertura. Sin dudas, se trata de una necesidad de la población en relación con la prestación de un servicio público que remedie la situación. “Esto ya fue hablado con el intendente y se piensa en algún servicio que le pueda dar solución a la familia, para en definitiva dar mejor calidad de vida a los niños” dijo Cóccaro.
En los últimos años se ha tratado de mejorar el acceso al sistema del municipio a través de los centros de salud. Aunque está claro que, en especialidades como oftalmología, la situación está lejos de ser la ideal. “Tenemos el centro de especialidades médicas donde contamos con la prestación de oftalmología, pero lógicamente la demanda supera la posibilidad de atención”agregó la secretaria de Salud municipal.
La necesidad de la comunidad es notoria, y así quedó evidenciado esta semana. Programas de prevención y cuidado, más otras acciones del municipio como la campaña el año pasado de prevención del cáncer de mama, incluyendo controles ginecológicos y mamografías, revisten importancia y son efectivas.
Pero, es crucial que la atención sanitaria primaria y de especialidades que pueda brindar el municipio, llegue efectivamente a la población en la forma continua y regular que lo requiere, más allá de campañas o acciones importantes, pero eventuales.
Así entonces, las políticas públicas que se generen lograrán su objetivo de mejorar la calidad de vida de los habitantes de la ciudad.
Fuente: Radii Fueguina