Al igual que en el resto del país, un grupo de vecinos de Ushuaia, además de partidos políticos de la oposición, se sumaron ayer a la protesta convocada por redes sociales bajo el hastag #12O. Lo hicieron con banderas argentinas y carteles en los que planteaban distintos reclamos.
En tanto, a nivel nacional, manifestantes opositores se concentraron en el Obelisco y en distintos puntos del interior del país para rechazar políticas públicas impulsadas por el Gobierno, en una protesta convocada por las redes sociales bajo el hashtag #12O y que mostró variadas consignas, entre ellas, cuestionamientos a las restricciones que impone la pandemia de coronavirus.
En automóviles o a pie y con una variada batería de consignas, expresadas en carteles que emulaban banderas argentinas, los manifestantes se concentraron en el centro porteño y en otros barrios de la ciudad, además de la localidad bonaerense de Olivos, frente a la quinta presidencial, donde también llegaron sectores oficialistas para apoyar al Gobierno nacional.
La protesta opositora, que tuvo su réplica también en ciudades del interior del país, como Mendoza, Mar del Plata, Rosario, La Plata, Córdoba, Corrientes, Salta, Santa Fe, San Luis y Bariloche, entre otras, fue celebrada por el expresidente Mauricio Macri.
En la capital provincial entre 100 y 150 personas se congregaron y marcharon para manifestarse contra las medidas del Gobierno nacional y provincial y las restricciones de la cuarentena.
La convocatoria a nivel nacional que se denominó “El Banderazo del 12 de octubre” o “12O”, se desarrollo en la Plaza Cívica con banderas argentinas para expresar su descontento principalmente con las políticas que implementaron los gobiernos nacional y provincial ante la pandemia.
Uno de los concurrentes explicó las razones por las que decidió sumarse a la marcha “El tema era la libertad. Los derechos del ciudadano avasallados porque solo mediante el estado de sitio se puede impedir que la gente transite. Hace 7 meses que nos tienen confinados y ahora resulta que nos encontramos en un pico, con los resultados nefastos que ya todos conocemos. Nos hubieran dejado los primeros meses vivir en paz y trabajar, pero no, hicieron todo al revés”.
Respetando la distancia social, con un redoblante y banderas sin consignas políticas, solo celestes y blancas, los manifestantes permanecieron con camperas y gorros en una tarde que fue inclemente, antes de dispersarse y regresar a sus hogares.
“Nos manifestamos porque es el modo de hacerle entender al Gobierno que no estamos conformes con la manera que maneja nuestras vidas. Necesitamos muchos de nosotros trabajar y creemos que podemos hacerlo de manera organizada y con los protocolos que correspondan. Acá el descontrol lo armaron ellos, las autoridades de Gobierno, que liberaron la noche y por eso ahora estamos como estamos”, indico otro de los participantes.