Hartos. Jubilados provinciales se encadenan en un nuevo intento de ser escuchados por el Ejecutivo provincial y las autoridades de OSEF.
Pasivos provinciales denuncian la continuidad de políticas de absoluto mal trato, como la exposición a la intemperie para poder acceder a un medicamento o un sello; la dilapidación del dinero de la obra social en alquileres de 700 mil pesos mensuales; derivaciones “con coronita” de funcionarios y una pretensión legislativa de obligarlos a efectuar un mayor aporte, entre otros puntos no menos graves.
Pese a que una y otra vez los jubilados y activos que deben comprar sus medicamentos a través de la obra social OSEF, cuya farmacia funciona en la calle Fitz Roy 350, han reclamado el suplicio que significa hacer colas por largas horas a la intemperie, apenas guarecidos por un techo de chapa por el que se filtra el agua, para poder acceder a un medicamento u obtener un sello que les permita ir a comprarlo a otro lugar, las autoridades siguen haciendo oídos sordos.
A esa circunstancia repetida, se suma a otra gran cantidad de acciones de mal trato literal de parte del Gobierno provincial y de la obra social, por lo que hoy se manifestarán a través de una protesta en las calles, que incluirá encadenamientos. Y si faltaba algo más para decidirlos a manifestarse, una iniciativa del bloque legislativo de FORJA, con el legislador Federico Greve a la cabeza, proponiendo que se les descuente un porcentaje mayor del que actualmente se les resta de sus haberes jubilatorios, terminó por constituirse en la gota que colmó el vaso.
“Los funcionarios son los que producen gastos mal utilizando nuestro dinero, y contratan servicios a conveniencia de unos pocos, como la cifra exhorbitante que pagan de alquiler por la oficina de la calle Alfonsina Storni; el pago de una fortuna por un sistema informático obsoleto, que ni siquiera actualizan; derivaciones bajo excepción para funcionarios mientras que solo hay negativas para los afiliados en general; el aumento de los cargos políticos, uso discrecional de pasajes y viáticos; contratación de ñoquis al por mayor”, afirmaron los pasivos, dejando aclarado además que se oponen tajántemente a que se les deduzcan nuevos items de sus haberes jubilatorios.
“Esto es muy grave porque los aportes extraordinarios nuestros se pueden usar para tapar otros agujeros oscuros del Ejecutivo, por la falta de una normativa estricta que lo impida, que asegure que sólo se puedan usar con un destino específico, como puede ser la salud. ¡Que empiecen ellos, las autoridades por hacer austeridad, antes de obligarnos a hacer más aportes!. Si no el aumento también será fagocitado sin ver ninguna acción favorable para los afiliados, que cada vez vemos más recortadas las prestaciones” – expresaron.
“El legislador Greve propuso lo más fácil, que es manotear lo que cobramos los afiliados, aumentándonos la cuota mensual de aportes pero en ningún momento propuso reducir los gastos superfluos de los cargos políticos, los gastos astronómicos de contratos informáticos, alquileres, y otros, adjudicados a proveedores vitalicios, con dudosa tramitación. Así siempre la austeridad y los recortes caen sólo sobre nosotros, los más vulnerables. Tampoco propuso ninguna normativa que impida que los fondos que nosotros aportemos vayan a parar a otros destinos que no sea la salud. Además este Gobierno sólo utiliza esa cartera para desbordarla de cargos políticos, uno más ineficiente e inoperante que otro. Tampoco nadie nos asegura que el incremento de aportes será proporcionalmente directo a la mejora de los servicios. Aunque nos dijeron que priorizarán la salud del afiliado eso es mentira, porque sólo actúan después de hacernos parir, cuando estamos a veces al borde de la muerte, con recursos de amparo judicial de por medio. Si no, nos ignoran totalmente” – sostuvieron.
“Esta es una gestión insensible, inhumana, mediocre, lerda e indefendible. Estos señores se creen dueños de la provincia y lo único que hacen es seguir perjudicando tanto al activo como al pasivo. Por eso tenemos que actuar de una vez por todas, porque día a día menos beneficios tenemos, todo lo contrario de lo que pasa con ellos. ¡No hay que tener miedo basta de que nos sigan castigando! – expresaron mientras se organizaban para intentar revertir la crítica situación de desamparo en la que se encuentran.
“Jamás Greve vino a interiorizarse o atendió la problemática de los afiliados. Nunca le importó nada.
Es muy difícil creerle que se vayan a aumentar los aportes en beneficio de los afiliados. Muchos creemos que en realidad necesita más fondos para la corona y que se le presentó esto como una buena excusa. Además hay dudas que si logra saquear nuestros sueldos, realmente con eso se solucionará algo de la obra social, o seguirá todo igual o peor. No nos dejemos engañar otra vez.
¡Que empiecen los funcionarios de OSEF por hacer austeridad!. ¡Hasta cuándo hay que arrodillarse frente a Banthje, que se la lleva en pala, pero no invierte un centavo en mejorar un sistema obsoleto del jurásico!. ¡Hasta cuándo vamos a soportar, que por la computadora de la farmacia nos demoren hasta media hora para atendernos!. Si la presidente ya nos metió la mano en el bolsillo, con la cobertura de varios medicamentos, a su libre antojo, ¿qué garantía tenemos de que el saqueo de Greve, no sea una pantalla con el mismo fin siniestro?.
Basta de mentiras. Aplaudir a Greve es como ver a una vaca o a un pollo aplaudir al carnicero… Nunca se vió en la historia de la isla, una gestión tan deplorable en la cartera de Salud, como ésta de Forja. Es el peor gobierno de la historia de la isla.
Soberbios, inútiles, mudos, ciegos y sordos. ¡¡Y ahora se colgaron del peronismo para subsistir dos años más!!”.
La historia sin fin…
Aunque no dejan de reclamar y de sufrir día a día, los afiliados activos y pasivos que deben acudir a la farmacia de la calle Fitz Roy, frente al HRU, para acceder a medicamentos, la situación sigue como si a absolutamente nadie de los que cuentan con el poder de aportar una solución, les importara en lo más mínimo.
Todos los días se ve a infortunadas personas de todas las edades, algunas muy enfermas, paradas a la intemperie, haciendo cola con temperaturas bajo cero, en días de nevadas intensas, intentando acceder a un medicamento para ellos o para algún ser querido a cargo. La mayoría de las veces la larga espera solo termina en la colocación de un sello que los habilita a buscar en una farmacia privada, el necesitado remedio.
Indiferentes e inconmovibles los funcionarios miran para otro lado.
“Ya no sabemos qué más hacer para que se revierta este estado de cosas con nuestra farmacia. No puede ser que los afiliados padezcamos como lo hacemos cada vez que tenemos que acceder a nuestros remedios, al igual que les pasa a los activos. La gran mayoría de las veces nuestra farmacia no cuenta con lo que necesitamos y hay que ir con la receta a farmacias privadas. Pudimos saber que una sola farmacia el año pasado cobró 55 millones de pesos y otra de Río Grande, que está además denunciada penalmente pero sigue facturando, el año pasado cobró casi 25 millones . Esos recursos podrían ser nuestros si nuestra farmacia trabajara medianamente bien. Lo mismo pasa con el alquiler de las oficinas de la calle Alfonsina Storni. ¡No es posible seguir pagando el altísimo costo de 700 mil por mes!.” – finalizaron diciendo, completamente desesperanzados.
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