Mientras los vecinos de Rio Grande, son afectados por múltiples cortes de energía y desde la Cooperativa Eléctrica se excusan en la falta de fondos para cambiar una de las turbinas, los sueldos de los directivos siguen siendo uno de los mas altos de la provincia, con personal que cobra mas de medio millón de pesos mensuales. Increíblemente los medios no levantan una voz critica a la gestión de la Cooperativa puesto que reciben un suculenta pauta publicitaria no solo de la Cooperativa sino incluso del sector político que maneja la misma desde hace muchos años.
En cuando a los constantes cortes de luz, el Gerente de la Cooperativa Eléctrica Miguel Casielles admitió que por el estado del parque energético podría haber mas cortes para realizar tareas de reparación en una de las turbinas.
Mientras tanto el gerente técnico de la Cooperativa Eléctrica, Ingeniero Walter García, explicó por Radio Universidad la situación crítica que se está viviendo en materia de generación eléctrica, tras la salida de funcionamiento de la turbina principal, que hoy es reemplazada con dos máquinas del año ’60.
De hecho ya hubo cortes de luz en la ciudad en los últimos días, debido a la necesidad de parar para ir haciendo ajustes, y la situación se va a mantener en estas condiciones hasta que se pueda instalar un motor reacondicionado, que gestiona el gobierno fueguino.
Indicó que la turbina principal nuestra, que es la General Electric y genera casi 29 megavatios, “tuvo problemas en los circuitos de aceite. Se detectó que un compresor estaba en proceso de deterioro que podía llevar a la destrucción del motor. La decisión fue parar la máquina para poder repararla. El año pasado se mandó a reparar a Alemania otra parte donde había problemas con un rodamiento. Esa parte la manejó la Cooperativa con un leasing y se pudo seguir generando normalmente. Esa parte está repuesta, pero el problema que nos afecta en este momento es un rodamiento del compresor de la otra punta de la turbina. El problema es que este elemento no se puede reparar en la zona e implica mandar a reparar la máquina a un taller especializado y no hay en el continente sudamericano. Hay que mandarla a Estados Unidos o Alemania”, dijo.
“La Cooperativa no tiene manera de pagar esto porque no solamente hay que enviar el equipo, sino que hay un costo mientras el equipo está afuera. Las reparaciones llevan cuatro o cinco meses porque entran en línea de espera. Esto implica que uno tenga que alquilar una turbina igual a la que se manda hasta recibir la reparada. Son cuatro o cinco millones de dólares por la reparación”, estimó.
Como alternativa se analiza “la compra de un motor reacondicionado con garantía de General Electric, que cuesta seis millones y medio de dolares. Conviene comprar un motor nuevo reacondicionado, con garantía, y esto permite quedarnos con un motor de repuesto. Cuando se repare el motor que hoy tiene problemas va a quedar como reaseguro del servicio. No tenemos otra fuente de suministro que no sea la generación propia”, señaló.
Costos imposibles El ingeniero detalló lo que implica enviar a reparar la turbina, no sólo por el peso del motor, que “es de cuatro o cinco toneladas”, sino por “el volumen, porque requiere un contenedor de 40 pies. Tenemos que mandar un contenedor especial para que la turbina no se deteriore, con amortiguaciones, y por vía aérea para no perder tiempo. Esto tiene costos importantes de flete, más la reparación y el tiempo que hay que mantenerse generando sin la máquina activa”, explicó. Comparó la reparación anterior, que “costó 900 mil dólares y la Cooperativa lo está costeando con fondos propios, a través de deuda, pero ahora estamos hablando de cuatro millones de dólares y es imposible pagarlo con recursos propios”. Pensar en una turbina nueva todavía es más complicado, porque implica como mínimo 22 ó 23 millones de dólares.
Fuente Cronicas Fueguinas.