La provincia rica en petróleo que no tiene plata para pagar los sueldos. Los empleados estatales rechazan el pago escalonado que propuso la provincia para cancelar los salarios de julio.
Lo que se ve a simple vista es un paro de empleados estatales en repudio al pago escalonado de sus salarios, escuelas cerradas, cortes de rutas, manifestaciones multitudinarias y renuncias intempestivas de funcionarios. Lo que hay detrás, el escenario económico sobre el que se monta el conflicto que ya lleva varias semanas en la provincia de Chubut, es una deuda que se multiplica atada al valor dólar y un gasto público que en el último año aumentó 135 por ciento.
La combinación de economía y política en Chubut arroja una paradoja. El gobernador Mariano Arcioni, que propuso aumentos salariales sustanciales, fue reelecto en junio pasado, y dos meses después debió escalonar los pagos por falta de recursos.
«El de Chubut no es un problema de ingresos», asegura Facundo Ball, economista chubutense y director del departamento de Economía de la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco. «Los últimos 15 años la provincia ha recibido recursos extraordinarios por regalías petroleras y los datos oficiales de la provincia muestran que hasta mayo los ingresos totales aumentaron en el orden del 80% interanual, por arriba de la inflación. El problema acá es que ha habido una expansión del gasto fortísimo que, incluso sin considerar las variables económicas desatadas luego de las PASO, se sabía que no era sustentable», explicó.
Chubut es la provincia con mayor producción de petróleo en el país -incluso por encima de Neuquén, donde está Vaca Muerta- y entre enero y julio de este año recibió $9063 millones en regalías. Pero así como ese flujo de dinero entra a la provincia, se va. Chubut tiene alrededor del 70% de sus regalías comprometidas en el pago de la deuda en dólares contraída por las últimas administraciones y el compromiso se cumple sin dilaciones. Las regalías se depositan primero en el banco pagador de los bonos, el Comafi, y a la provincia le llega lo que queda después de haber cancelado sus compromisos.
Hubo piquetes en las rutas de la provincia y el jueves pasado se realizó una multitudinaria marcha desde Trelew a Rawson Fuente: Archivo
«Si las regalías de un mes son $1500 millones, la provincia paga primero alrededor de $900 millones y con lo que sobra tiene que cubrir también la participación que le corresponde a los municipios, que es el 16% del total. Le quedan $300 millones con los que tiene que hacer frente a funcionamiento y mantenimiento del Estado», explicó a LA NACION una fuente local con acceso a los libros de la provincia.
Según los registros del Ministerio de Hacienda de la Nación, luego de varios años con una deuda provincial más o menos estable, en torno a los $1000 millones, en 2013 el stock se empezó a disparar. El salto más importante ocurrió del año 2015 a 2016, cuando la provincia pasó de adeudar $7427 millones a $20.542 millones, monto explicado fundamentalmente por la multiplicación de los títulos públicos.
A marzo de 2019 la deuda pública de Chubut registrada era de $43.476 millones sin considerar la «deuda flotante», que es aquella que está en Tesorería lista para pagar a la espera que haya fondos y que, según fuentes provinciales, puede estimarse en $500 millones más. Además, por estar mayormente en dólares se actualiza a la velocidad del tipo de cambio y a valores de hoy rondaría los $58.000 millones.
Elección vs. contabilidad
Iniciado el conflicto con los estatales, a principios de agosto, funcionarios expusieron datos para argumentar el esfuerzo hecho para mantener el ingreso de los alrededor de 44.000 empleados que dependen de la provincia. Según los números oficiales, la masa salarial creció 113% entre junio de 2019 y el mismo mes del año anterior (pasó de$1748 millones a $3724 millones), porcentaje que supera por mucho a la inflación patagónica calculada por el Indec para ese período, que fue del 57%.
La preocupación de Arcioni, heredero del peronismo disidente de Mario Das Neves, por engrosar los bolsillos de los trabajadores públicos tuvo un correlato en las elecciones. Sólo en junio, por caso, la provincia puso casi $5.400 millones entre haberes y el medio aguinaldo. Ese mismo mes, Arcioni fue reelecto con el 38% de los votos -siete de ventaja sobre el candidato del kirchnerismo, Carlos Linares-, pero dos meses después, en agosto, ya no pudo hacer frente a las obligaciones de julio y recurrió al pago escalonado: primero cobran los trabajadores con salarios de hasta $40.000 netos, otra semana los que ganan hasta $65.000 y otra los que superan ese monto.
Según anticipó Oscar Antonena, el nuevo ministro de Economía provincial (asumió el jueves 15, luego de que el ministro anterior, Luis Tarrío, renunciara en medio del conflicto), esta metodología se extenderá al menos por seis meses más.
El gobernador Mariano Arcioni asumió el cargo en 2017, luego de la muerte de Mario Das Neves, y fue reelecto con el 38% de los votos el 9 de junio pasado Crédito: Twitter
Según un documento al que accedió LA NACION, los ingresos corrientes del período enero-mayo de 2019 fueron de $29.489 millones, 81,7% mayores a los del mismo período del año anterior, que fueron de $16.228 millones. Pese al crecimiento abrupto de los ingresos corrientes, los gastos crecieron a un ritmo todavía más frenético: 135%. Pasaron de $12.018 millones a $28.244 en el mismo período, explicados sobre todo por un aumento en los fondos destinados a personal.
Cerca del gobernador Arcioni explicaron que «la provincia ya venía con problemas» y pese a las recomendaciones hechas por su círculo de asesores, había una decisión del gobernador de «jugar fuerte para ganar las elecciones», lo que lo llevó a otorgar aumentos de sueldo voluminosos, con cláusula gatillo, y evitar entrar en conflicto con los múltiples gremios del sector estatal. A esto se le suma el hecho de que la caja de jubilaciones depende de la provincia y rige una ley de actualización del 82% móvil, atada a los salarios.
Ingresos condicionados
Además de las regalías, las otras dos fuentes de ingresos de la provincia son las transferencias de la Nación por coparticipación y otros conceptos y los tributos provinciales.
La provincia recibió entre enero y julio de 2019 $13.261 millones en recursos de origen nacional. Según un estudio reciente del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf), Chubut obtuvo entre enero y junio de 2019 un 47,3% más de dinero de la Nación en concepto de coparticipación, leyes especiales y compensación, comparado con el mismo período de 2018. Sin embargo, deflactado por el índice de precios del Indec, la variación real resultó de -4,5%. Pero no fue la única provincia afectada: menos Buenos Aires, todas registraron una variación real negativa.
Por otro lado, la provincia tiene descentralizada buena parte de su política tributaria. Los municipios recaudan los impuestos al parque automotor, los inmobiliarios e ingresos brutos de sus contribuyentes directos. La provincia solo recauda ingresos brutos de la actividad ganadera y bajo el Convenio Multilateral, es decir, solo de aquellas firmas grandes, con actividad más allá de la provincia como cadenas de supermercados o petroleras.
Arcioni dijo que no está dispuesto a endeudarse a tasas del orden del 70% para pagarle el salario a los estatales
El reciente DNU del Gobierno Nacional orientado a congelar el precio de la nafta fijando un dólar petrolero a $45 también dio un golpe a la billetera provincial, ya que la decisión afecta la base de cálculo para la liquidación y pago de las regalías petrolíferas.
La explicación de Arcioni frente a esta situación de crisis en la provincia fue que la «volatilidad financiera» le impidió tomar créditos a corto plazo para pagar los sueldos a los estatales, tal como tenía planeado. Dijo que pese a haberlo solicitado con tiempo, el Banco Central lo autorizó a endeudarse recién el jueves previo a las PASO, apenas antes de que se desatara la turbulencia financiera que provocó la disparada de la tasas de interés. «Yo no estoy dispuesto a tomar un endeudamiento a corto plazo a tasas superiores al 70%, porque eso es aumentar la deuda y así no saldremos adelante», sostuvo Arcioni. Si bien este diario intentó comunicarse con el gobernador y con varios funcionarios de su gabinete, no tuvo respuesta.
Claves
- El stock de la deuda provincial, constituido mayoritariamente por títulos públicos, se actualiza con la velocidad de la apreciación del dólar. A valores de hoy ronda los $58.000 millones.
- Alrededor del 70% de las regalías que percibe la provincia se destinan automáticamente al pago de deuda. Los fondos nacionales en concepto de coparticipación, leyes especiales y compensación aumentaron 47,3% entre enero y junio de 2019, pero la variación real fue del -4,5%
- Entre enero y mayo de este año el gasto corriente de la provincia aumentó 135% respecto del mismo período de 2018, explicado sobre todo por la suba del gasto en personal, que pasó de $7608 a $16.829 millones
Fuente: La Nación