El incidente tuvo lugar en el buque “Viking Polaris” de bandera noruega.
Según los datos preliminares recabados por las autoridades de la Prefectura Naval Argentina (PNA), el barco tuvo un primer incidente en alta mar con un bote semirrígido, en el que resultaron personas heridas, y cuando regresaba hacia el puerto capitalino atravesó una tormenta con fuertes vientos, durante la cual falleció la turista norteamericana.
Una mujer estadounidense que realizaba un crucero a la Antártida falleció producto de un accidente ocurrido a bordo mientras la embarcación atravesaba una fuerte tormenta, al tiempo que también se registraron otras personas heridas, informaron el pasado jueves fuentes judiciales abocadas a la investigación de lo ocurrido.
El incidente tuvo lugar en el crucero “Viking Polaris” de bandera noruega que hacía pocos días había recalado en el puerto de la ciudad de Ushuaia por primera vez para iniciar sus viajes antárticos utilizando como base a la terminal fueguina.
Según los datos preliminares recabados por las autoridades de la Prefectura Naval Argentina (PNA), el barco tuvo un primer incidente en alta mar con un bote semirrígido, en el que resultaron personas heridas, y cuando regresaba hacia el puerto de Ushuaia atravesó una tormenta con fuertes vientos, durante la cual falleció la turista estadounidense.
A la espera de mayores precisiones cuando exista un informe definitivo de la PNA, los voceros consultados indicaron que la mujer recibió los golpes de una superficie vidriada que se desplomó en medio del temporal.
El crucero retornó por unas horas al muelle local y luego quedó anclado en las inmediaciones mientras comenzó a sustanciarse una causa judicial por “averiguación de muerte” que se tramita en el Juzgado Federal de Ushuaia, a cargo del juez Federico Calvete, indicaron las fuentes.
Durante noviembre fallecieron otros tres turistas que realizaban periplos antárticos, uno por causas naturales y dos hombres de 76 y 80 años (también estadounidenses) que cayeron al mar cuando se dio vuelta un bote semirrígido en el que realizaban una excursión.
En ese caso, los visitantes eran pasajeros del “M/V Word Explorer”, un crucero antártico de origen portugués que realiza viajes polares para la empresa “Quark Expeditions”.
El “Viking Polaris” es un barco de 202 metros de longitud (eslora) y 24 de ancho (manga) con capacidad para 378 pasajeros.
Se trata de una nave nueva construida este año con 189 camarotes y especialmente equipado para navegar en zonas extremas, según consigan distintos sitios náuticos especializados.
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