Después de haber permanecido tres noches fuera de la Unidad de Detención Nro. 1, el interno Julio Esteban Juárez, fue recapturado y regresado a su celda.
El preso, amante de los anillos de plata de gran tamaño al punto de usar uno en cada dedo, gozaba de salidas laborales diarias hasta que el lunes último, pareció que se lo había tragado la tierra. Recién el jueves por la mañana él mismo se comunicó telefonicamente con el Servicio Penitenciario y un rato después, lo fueron a buscar al domicilio particular en donde había estado escondido.
Julio Juárez salió el lunes último de la Unidad de Detención Nro. 1 de Río Grande, haciendo uso de un permiso laboral y nunca más volvió. Y permaneció en libertad hasta el jueves 14 de septiembre, cuando él mismo se comunicó con el Servicio Penitenciario.
El hombre de 39 años de edad salió el lunes último del recinto carcelario ubicado en el Km 7,5 de la Ruta Nacional Nro. 3 como lo venía haciendo habitualmente, en goce de un permiso de salida laboral, pero ésta vez al caer la noche no regresó. Juárez accedió a dicho beneficio gracias a un informe institucional positivo sobre su conducta, pese a que en otras ocasiones también incumplió las pautas que se le habían fijado. Así se le permitió salir de su lugar de reclusión a diario, de lunes a sábados, para prestar servicios en una bloquera y en un criadero de animales de granja, con la condición de regresar a las dependencias penitenciarias una vez cumplidas las tareas, al caer la tarde.
El prófugo de la Justicia estaba cumpliendo una condena de 5 años de prisión por la comisión del delito de robo y había logrado que se lo encuadrara en la “fase de confianza”, un estadio en el período de reclusión en el que se posiciona a los internos que demuestran buena conducta.
Para llevar tranquilidad a la población, el mismo día jueves a las 11 de la mañana, la Policía Provincial informó a la prensa: “Personal de la División Delitos Complejos en conjunto con la Sección Robos y Hurtos tras efectuar labores investigativas localizaron al interno Julio Esteban Juárez en el exterior del domicilio sito en Pasaje Varela 35. Se puso en conocimiento inmediatamente al Juzgado de Ejecución y al Servicio Penitenciario procediéndose al traslado de Juárez a instalaciones carcelarias, donde quedó alojado previo examen médico de rigor”.
En relación al futuro del presidiario sobre el que se lo consultó al abogado y director del Servicio Penitenciario de Tierra del Fuego, Claudio Canovas, informó que “en principio se le cortarán las salidas laborales con régimen amplio de las que gozaba y se retrotraerá en la fase en la que se encontraba enmarcado, la `Fase de Confianza´, resultante de informes laborales de los servicios criminológicos”.
Juárez estaba en el exterior de una vivienda sita en el pasaje Felipe Varela, del barrio Juan Domingo Perón, cuando arribó el móvil de la Brigada de Delitos Complejos de la Policía para recapturarlo por segunda vez, ya que en una ocasión anterior también se había profugado mientras cumplía la misma pena.
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Diario Prensa
