Había sufrido el domingo último lesiones muy graves en un choque frontal en la Ruta 3.
Justine Dejjemeppe, de 26 años de edad, dejó de existir el jueves 2 de marzo, a causa de severos politraumatismos y de una lesión en la columna vertebral, en el área de terapia intensiva del Hospital Regional Río Grande. Se domiciliaba en Bruselas y se encontraba junto a otra joven belga, de visita en Tierra del Fuego. La carátula del expediente, que era hasta ahora por “Lesiones graves”, pasó a ser por “Homicidio culposo”.
Justine Marie Dejjemeppe, de 26 años de edad, hizo 13.522 kilómetros desde la ciudad belga de Bruselas hasta el lugar que añoraba conocer, Ushuaia. En sus últimos momentos en la capital fueguina, en horas de la mañana del domingo 26 de febrero, se subió al vehículo equivocado, quizás marcado por el destino. Junto a su amiga Clemente Geraldine B. Nelis, decidió hacer dedo para poder llegar a Río Grande. Momentos más tarde se detuvo en la banquina, para ofrecerse a trasladarlas, René Vega, un residente ushuaiense que manejaba un rodado Chery Fulwin, de color rojo y que iba justamente a la ciudad del norte provincial.
Casi a la misma hora, estaban saliendo a la Ruta 3, desde Río Grande y rumbo a Ushuaia, los hermanos Juan Cruz Tornabene, de 28 años de edad y Lucas Mariano Tornabene, de 30, en un automotor Toyota Corolla, de color blanco.
A mitad de camino, en el Km 2.946 de la Ruta Nacional Nro. 3 y a unos 6 kilómetros de Tolhuin, los dos vehículos se encontraron en la cinta asfáltica y chocaron violenta y frontalmente. Cuando el personal del Centro Asistencial de Salud y efectivos policiales de la Comisaría de esa localidad arribaron al lugar para asistir a los heridos, los primeros en ser trasladados al Hospital Regional Río Grande fueron Justine Dejjemeppe y Juan Cruz Tornabene por presentar lesiones de mayor gravedad. Posteriormente también los demás, con lesiones leves, fueron derivados al nosocomio riograndense, para ser sometidos a estudios de complejidad.
El jueves 2 de marzo y luego de permanecer cuatro días internada en la Unidad de Terapia Intensiva del HRRG, Justine falleció, sin haber podido superar las consecuencias del fortísimo impacto sufrido en la cabeza y en la columna vertebral, lesiones que le habían provocado además la pérdida de sensibilidad en las piernas. La acompañaban su madre y una hermana, quienes viajaron desde Bélgica a la provincia, ni bien se enteraron de lo ocurrido. La joven mochilera era una destacada atleta en su país, amante de la naturaleza y los viajes.
La investigación
Antes de ser retirados de la escena del siniestro vial, René Vega, conductor del vehículo Chery Fulwin y Juan Cruz Tornabene, del Toyota Corolla, fueron sometidos al test de alcoholemia, constatándose que ninguno de los dos tenía trazas de alcohol en sangre.
A tal efecto tomó intervención en el caso el titular del Juzgado de Competencia Integral de Tolhuin, el magistrado José Silvio Pellegrino, con intervención del pro secretario interino del Ministerio Público Fiscal, Eduardo Alfredo Benítez. La causa, inicialmente caratulada “Lesiones graves y leves”, pasó en las últimas horas a “Homicidio culposo”.
Fuentes extraoficiales dejaron trascender que de las pericias practicadas en el lugar de los hechos, como por ejemplo vistas fotográficas de las marcas de los neumáticos de ambos rodados y el análisis de los daños en las carrocerías, surgiría en primera instancia que el automóvil Toyota Corolla habría invadido el carril por el que en forma opuesta circulaba el vehículo Chery Fulwin. De confirmarse la versión, Juan Cruz Tornabene sería acusado penalmente por el delito de homicidio culposo, no quedando exento de responsabilidad civil el conductor del Chery Fulwin en el que estaba Justine y su amiga, dado que la ley prevé, en el marco de lo que se denomina “transporte benévolo” y aún cuando no hubiera provocado el suceso, que quien está en el control de cualquier rodado debe responder siempre por las consecuencias que sufran las personas que transporte.
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