El Poder Ejecutivo cedió a la presión del Senado y dio marcha atrás con el recorte a Asignaciones Familiares
A partir del decreto firmado por el presidente Macri un mes atrás y que buscaba disminuir el valor de las asignaciones familiares para la Región Patagónica comenzaron a tomarse distintas medidas para poner freno a esta decisión.
Con la presentación del proyecto firmado por los senadores José «Nato» Ojeda, Julio Catalán Magni y por el jefe del bloque Peronismo Federal, Miguel Ángel Pichetto, al que se sumaron luego numerosos legisladores y otras iniciativas, se lograron articular legítimos recursos institucionales que ejercieron
la presión suficiente para que hoy el Gobierno haya decidido derogar el decreto que suspendía los beneficios especiales por zona.
«La decisión del Gobierno Nacional es una demostración de la fuerza que podemos ejercer desde la unidad, en este caso la de los representantes de la Patagonia», señaló el senador Ojeda y agregó «ahora debemos seguir atentos a las medidas del Gobierno Nacional que puedan tener impacto en nuestra provincia en particular y en toda la región en general».
«Esto fue posible gracias a que trabajamos todos con un objetivo común ya que cuando se atenta contra los más humildes cualquier diferencia debe pasar a un segundo plano», agregó.
La medida anunciada a fines de julio que pretendía aplicarse en septiembre despertó el rechazo de todo el pueblo fueguino al que se sumaron la mayoría de las fuerzas políticas provinciales.
Fue tal la reacción política y social que en el día de la fecha se restituyó la vigencia del Decreto Nº 1245/96 que establece los montos de las Asignaciones Familiares tanto de los beneficiarios del ex Sistema Integrado de Jubilaciones y Pensiones (hoy SIPA) que residan en las provincias de Chubut, Neuquén, Río Negro, Santa Cruz, y Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur, así como también de los trabajadores que desempeñan actividades en relación de dependencia.
