Como consecuencia de la cuarentena por la pandemia de coronavirus muchas personas aprovecharon el tiempo para incursionar en proyectos orgánicos para cosechar verduras, hortalizas y especias mucho más nutritivas y con un sabor único.
Las huertas caseras o huertos urbanos son tendencia en el mundo, y el país no fue la excepción. Y si consideramos que esta inesperada pandemia de coronavirus nos ha cambiado radicalmente la vida a muchos de nosotros, pensar en armar una pequeña huerta, o no tanto, es un salto de calidad de vida, por los productos que se logran, al promover el consumo responsable y la sensibilización ambiental, además de cuidar la economía del hogar, una ventaja importante.
Esas verduras, hortalizas y especias cultivadas tienen un sabor único, producto del cuidado y la constancia durante meses y, desde el punto de vista nutricional, son más saludables que las compradas en el supermercado. Para los primerizos aquí va una lista de pasos a seguir para crearlo:
1) Lo primero que hay que hacer es decidir el espacio que ocupará. Debe ser un lugar soleado, que cuente con luz natural el máximo de horas diarias (no hace falta que sea directa). Una terraza, un balcón, un patio o una ventana son lugares apropiados para cultivar.
2) En función del espacio disponible se puede montar dos tipos de huerto: horizontal, con macetas colocadas una al lado de la otra; o vertical con distintos niveles que, además de ahorrar espacio permite trabajar con mayor comodidad.
3) Paso clave: elegir qué plantar. Al principio es recomendable iniciarse con cultivos fáciles que no den problemas. Aquellos que no se vean afectados por plagas o enfermedades, que tengan un ciclo corto, que sean de fácil manejo y que se puedan cultivar durante la mayor parte del año. Acelga, ajo, cebolla, rábano y lechuga cumplen los requisitos.
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4) Recipientes: según las dimensiones del espacio seleccionado habrá que seleccionar distintos tipos de macetas o contenedores. Entre los 7 y 15 cm de profundidad se pueden plantar zanahorias, tomates, rábanos, berenjenas, pepinos, menta o albahaca, ya que las raíces no requieren mucho volumen si tienen suficiente agua, aire y nutrientes.
5) La tierra: el sustrato es muy importante porque ayudará, entre otras cosas, a que las plantas sean resistentes a plagas (pulgón, mosca blanca, babosas, etc.) y enfermedades. Además, debe proporcionar sujeción a la planta, ser capaz de retener cierta cantidad de agua y permitir la circulación del aire.
El más conveniente es el sustrato para plantas, que se encuentra en cualquier floristería o tienda especializada. Es importante el uso de abonos correctos, porque las tierras suelen agotarse rápido.
6) ¿Cómo regar? La frecuencia dependerá de la época del año y la cantidad de plantas que haya en el huerto. Por ejemplo, en verano es necesario regar dos o tres veces al día. Una vez que comience a salir agua por debajo de la mesa o maceta, el riego debe finalizar.
