Un restaurante yanqui cerró tres meses porque uno de los empleados dijo estar contagiado de Covid-19 para tomarse unos días de descanso. «El asunto pasará a legales», aseguró el gerente del lugar.
Ocurrió en un restaurante de Ludington, Estados Unidos.
Un hombre que trabajaba en un restaurante situado en Ludington, Estados Unidos, fingió tener coronavirus para no tener que asistir a su empleo durante varios días y su mentira le costó una fortuna millonaria a su jefe.
El suceso se registró en el restaurante «Timbers Seafood and Steakhouse», el cual tuvo que cerrar por culpa de ese empleado. Según trascendió David Hritco, el gerente del lugar, se preocupó al recibir la llamada del trabajador, le dijo que se quedara en su casa, envió a sus hogares al resto de sus compañeros, desinfectó el lugar y lo cerró por varios meses.
«Fue desgarrador enterarme que lo del contagio fue una mentira. Cerré el restaurante por casi tres meses. Fue lamentablemente, nos costó miles de dólares en negocios. Esto no va a quedar así, pasará a ser un asunto policial», aseguró Hritco.
En tanto, agregaron que la mentira del trabajador también afectó a sus compañeros, quienes tuvieron que someterse a diferentes pruebas de salud para determinar si habían sido contagiados con el temido virus.