Maximiliano Perpetto y Calderón, detenidos por su participación en una balacera durante un acto político del Partido Justicialista (PJ), recibió el domingo pasado varias visitas de altos funcionarios provinciales. Entre los visitantes estarían el jefe de gabinete Agustín Tita, el viceministro Jorge Canals y el jefe del sistema penitenciario, Ariel Ciares. Fuentes sugieren que los funcionarios temen que los detenidos se convertirán en testigos arrepentidos.
Desde sectores opositores al gobierno provincial indican que las visitas podrían tener como fin evitar que Perpetto y Calderón ofrezcan declaraciones comprometidas en calidad de «arrepentidos», una situación similar al caso mediático de Leonardo Fariña, testigo clave en causas de corrupción. La posibilidad de que los detenidos puedan implicar a otros funcionarios en el incidente ha generado especulaciones sobre la finalidad de estas visitas.
Fuentes internas de la cárcel de Ushuaia confirmaron que los encuentros tuvieron lugar, aunque aún no se ha emitido un comunicado oficial por parte de las autoridades involucradas. La situación ha desatado críticas y pone en el centro de atención el accionar de altos funcionarios en el manejo de casos judiciales que involucran a figuras del ámbito político.
fuente: cronicas fueguinas