Un obrero de la construcción identificado como Juan Fernandez Oyarzo murió luego de caer desde un quinto piso mientras realizaba labores de altura en un edificio en construcción ubicado en la calle Raúl Muriel al 1945 de la ciudad de Ushuaia.
El episodio se produjo en momentos en que el mismo se encontraba en la parte posterior de un moderno edificio que se está construyendo en la zona del barrio Los Morros en la capital provincial. El hombre que se encontraba en un andamio que pendía de unas cuerdas en el quinto piso el cual era ascendido y descendido mediante el uso de poleas.
El edificio Miradores del Beagle, un complejo residencial de 6 pisos ubicado al final de la calle Raúl Muriel, una arteria sin salida del barrio Los Morros. En el cartel de obra figura que el edificio pertenece a la empresa Los Petreles S.A. y que está desarrollado por la empresa Eidico.
Por causas que se investigan el hombre cayó al vacío y quedó tendido en el suelo totalmente inconsciente. En cuestión de minutos arribaron al lugar los bomberos voluntarios del Cuartel Zona Norte del barrio La Cantera.
Al comprobar que Oyarzo no reaccionaba los bomberos comenzaron las maniobras de reanimación cardiorrespiratorias (RCP) pero los esfuerzos por lograr signos vitales fueron en vano. Al llegar la ambulancia el médico de la unidad sanitaria lo declaró formalmente fallecido.
En pocos minutos se hizo presente la Policía Científica que procedió labrar las actuaciones periciales y por orden judicial se dispuso el traslado del obrero fallecido a la morgue del Hospital Regional Ushuaia.
Efectivos de la Comisaría Tercera le tomaban declaración testimonial al resto de los obreros que estaban trabajando en el resto del edificio. Si bien hasta el momento no trascendieron los motivos, un dato no menor es que por esas horas se registraban fuertes ráfagas de viento en Ushuaia.
Asimismo un dato importante que investiga la policía, es determinar si el hombre tenía colocado el arnés, aunque parece que no tenía colocado el cabo de seguridad que en caso de caídas permite que las personas queden colgadas del arnés sin precipitarse al vacío.