Ante la variada oferta de cosméticos, es importante asesorarse con un profesional para que sea quien recomiende el producto adecuado para las particularidades de cada organismo.
Por Jimena Golender
salud@cronica.com.arEl universo de las cremas «antiage» es tan amplio y variado como los distintos tipos de piel que existen, cada una con sus especificidades dirigidas a cuidar y mejorar la salud de la dermis. Sin embargo, es fácil perderse entre los miles de productos cosméticos disponibles.Muchas personas adquieren cremas y serums antiarrugas de venta libre sin una prescripción ni recomendación médica, con la esperanza de que estos productos puedan reducirlas y prevenir o revertir el daño causado por el paso del tiempo. ¿Pero realmente funcionan?El primer paso para comprender de qué se tratan y cuáles son sus beneficios, es asesorarse con un profesional, quien además podrá evaluar y así definir el producto más eficaz -sea o no de venta libre- para tratar las particularidades de tu tipo de piel.«Debido a que las cremas antiarrugas de venta libre no están clasificadas como medicamentos, no se requiere que se sometan a investigación científica para probar su efectividad. Además suelen contener concentraciones más bajas de ingredientes activos que las cremas recetadas», advierte la dermatóloga Valeria Andrea Villoldo (M.N. 100549). También te puede interesar:Los peligros de tomar dióxido de cloro como remedio contra el coronavirus
El segundo aspecto a considerar es la acción de cada uno de sus ingredientes. Según la especialista, entre los principios activos más usados en las rutinas antiage se destaca la Vitamina C (ácido ascórbico) que aporta luminosidad y reduce la aparición de manchas. También estimula la formación de colágeno y ácido hialurónico mejorando la hidratación de la piel.
También son frecuentes los alfahidroxiácidos (incluyen el ácido glicólico, cítrico y láctico), utilizados para eliminar células muertas de la piel y prepararla para absorber mejor otros productos. A su vez, estimula el crecimiento de una nueva piel lisa y con un tono uniforme. Entre los ingredientes más conocidos se encuentra el ácido hialurónico, que hidrata, regenera la piel y rellena arrugas. Esta sustancia existe de forma natural en el cuerpo aunque con el tiempo su presencia disminuye. Su alto poder hidratante mejora el aspecto y firmeza de la piel.
Los retinoides, término utilizado para los compuestos de vitamina A, se aplican para reparar la piel dañada por el sol y reducir las arrugas. Tienen un efecto exfoliante, seborregulador y estimulan la formación de colágeno. Otros ingredientes son la coenzima Q10, que protege la piel del envejecimiento celular, neutraliza los radicales libres y regenera de la dermis; y la niacinamida, que mejora la textura de la dermis, el aspecto de los poros y reduce el acné .