«Un auténtico milagro», así es como sus padres definen su historia.
Kasen Donerlson, un bebé de solo un año, se convirtió en todo un superviviente. Este pequeño ha sido capaz de superar el coronavirus y, además, un trasplante de hígado en solo dos meses.
«Un auténtico milagro», así es como sus padres definen su historia. Kasen nació el pasado enero de 2020, y desde el primer momento comenzó a tener problemas. Los doctores le diagnosticaron atresia biliar, una insuficiencia que afecta al hígado, cuando los conductos biliares no se desarrollan adecuadamente.
A pesar de los intentos por solucionar el problema con diferentes procedimientos, ninguno funcionó. En julio los peores pronósticos se confirmaron: Kasen necesitaba un trasplante de hígado para sobrevivir. Su estado fue empeorando mientras esperaban el ansiado trasplante.
Para mas complicaciones, en noviembre, el covid se sumó a la pesadilla. El pequeño se despertó con fiebre muy alta y en el hospital le confirmaron que se había contagiado del virus. Su infección hizo que el transplante tuviera que esperar, y sus padres se temían lo peor.
Afortunadamente, sus síntomas fueron remitiendo y dejó de tener fiebre hasta que superó la enfermedad. El 2 de enero, una llamada lo cambió todo: había un donante idóneo. La familia se desplazó hasta Pittsburgh, Pensilvania, para que el pequeño se sometiera a la intervención. Una cirugía de nueve horas de duración en el UPMC Children’s Hospital que se realizó con éxito, como recoge NYPost.