La pérdida del olfato que puede acompañar al coronavirus es única y muy diferente a la que puede experimentar alguien afectado por un fuerte resfriado o gripe. Al respecto opinó para Télam la Dra. Patricia Portillo Mazal, médica otorrinolaringóloga, especialista en olfato, Hospital Italiano de Buenos Aires.
La recuperación del sentido del olfato tras haber padecido coronavirus es muy variable, en algunas personas es cuestión de días (menos de dos semanas), pero en otras es mucho más compleja. Hay pacientes que pasan varios meses sin mejoría o con mejorías parciales, y también pueden presentar distorsiones olfatorias, es decir, sentir un olor que no está presente, olor fantasma, fantosmia, o, también, apreciar los olores alterados, distintos y, frecuentemente, feos.
Todavía falta mucho camino por recorrer, pero ya hay varios trabajos que guían en relación con el tiempo de recuperación del olfato cuando la pérdida es por Covid 19. Por caso, un estudio realizado en hospitales de distintos países de Europa (Bélgica, España, Francia e Italia) encontró que, de los pacientes con recuperación clínica completa, 44% habían recobrado completamente su olfato dentro de los primeros 14 días. Este mismo estudio realizado en varios países de América Latina, incluyendo a la Argentina, encontró que un 58% de los pacientes recuperó el olfato tras 14 días de resolución de la enfermedad.
Una investigación realizada por el Consorcio Global para la Investigación Quimiosensorial (GCCR, por sus siglas en inglés), que incluye aproximadamente 28 países de diversos continentes, halló que casi el 50% lo recuperaban dentro de los primeros 40 días. En Dinamarca, en tanto, luego de un seguimiento de 30 días, 44% de los pacientes notó un restablecimiento completo, 28% mejoró parcialmente y 28% no presentó mejoría.
Las estadísticas varían levemente, pero se podría decir que aproximadamente la mitad de las personas que presentan pérdida de olfato por Covid 19 recuperan su olfato dentro de los primeros 30 a 40 días. Entre las personas que no mejoraron durante este tiempo, algunos pasan varios meses sin sentir cambios (por ejemplo, 4 a 6 meses), y otros van notando pequeñas modificaciones luego de uno o dos meses.
El proceso de recuperación puede ser lento, tardar varios meses o un año, e, inclusive, parcial durante este tiempo. A veces, a lo largo de la convalecencia, los olores pueden percibirse distorsionados, frecuentemente, feos, en algunos casos, todo huele igual o similar, y, de a poco, se van diferenciando hasta el punto de que uno puede identificar qué es cada olor, aunque sigan estando alterados. El proceso puede traer frustraciones al no mejorar o mejorar lentamente, y momentos de alegría al percibir un olor o un nuevo olor. También puede requerir aprender nuevamente los olores.
¿Por qué algunas personas recuperan el olfato rápidamente y otras no?
En la parte de arriba de la nariz, hay una región en donde están las neuronas receptoras olfatorias que captan los aromas, las células de sostén que son esenciales para la vida de las neuronas olfatorias, y las células basales que pueden transformarse en neuronas olfatorias y células de sostén. Se ha demostrado que el nuevo coronavirus afecta a las células de sostén. Una hipótesis subraya que en algunos casos daña parcialmente a las células de sostén y esto causa una inflamación que afecta a las neuronas olfatorias. Por lo tanto, al mejorar la inflamación, la función se recupera. En otras personas, en cambio, el daño a nivel de las células de sostén es tan grande que, además, destruye a las neuronas olfatorias, por lo que la recuperación es mucho más prolongada y difícil. También existe una teoría que dice que las neuronas receptoras olfatorias realizan un proceso de muerte programada como autoeliminación, un mecanismo de defensa para evitar que el virus ingrese al cerebro.
Fuente: Télam