La docente de Río Grande fue considerada en el juicio como “una persona fría, calculadora y acostumbrada a hacer lo que quiere”. El matrimonio residía en Córdoba desde que el profesor se había jubilado en Ushuaia. A la mujer se le aplicaron tres agravantes: vínculo, alevosía y codicia. Aunque intentó insistentemente de persuadir a los […]