Argentina

San Valentín: sacrifican animales en macabros rituales para enamorar

Comparte:

Colibríes, palomas y gallos son asesinados cada año para «amarres» con intenciones de capturar a la persona amada. También son consumidos huevos de tortuga. 

Las flores, los chocolates y las parejas de la mano son las postales más difundidas en el Día de los Enamorados. Sin embargo, no todo es amor y amistad en esta celebración, que tiene una cara escalofriante: colibríes y huevos de tortugas marinas son sacrificadas cada año en México en rituales y hechizos para atraer a la persona amada

Así es el caso del colibrí, uno de los casos más preocupantes entre ambientalistas de México. Se trata de una pequeña ave, considerada sagrada desde la época prehispanica, ya que son polinizadores al alimentarse de néctar y posibilitar la reproducción de las plantas, por lo que son responsables de la diversidad de flora y fauna. 

Este rol del pajarito lo asocia al amor y la fecundidad y pese a ser una especie protegida por leyes mexicanas, es considerado un amuleto cada 14 de febrero, cuando son cazados miles para sacrificarlos en «amarres», un ritual mágico-religioso que se invoca para conquistar el corazón del ser amado.

Además, durante el conjuro, la tradición dice que hay que rezar una oración conocida como La Chuparrosa,en la que se reconoce el valor del colibrí para la biodiversidad y se pide que ese poder del pajarito sea el que lo vincule con la persona elegida.

Por tratarse de un pájaro en peligro, las autoridades lanzaron campañas cerca de los mercados tradicionales, donde pueden consiguirse a esos animales muertos como amuletos, y concientizar que es un pájaro con una función vital para la biodiversidad, y que es mucho mejor apreciarlo vivo.

Para que el sacrificio del colibrí surta efecto, la persona debe rezar la oración de La Chuparrosa.

El colibrí, sin embargo, no es la única especie utilizada con fines macabros en San Valentín. Los huevos de tortuga marina son consumidos en esta fecha al considerarlos como los mejores afrodisiacos, aunque no hay evidencia científica que avale esa creencia.

También son asesinados palomas y gallos en rituales pero al ser considerados animales de granja, no están protegidos por ninguna norma.