«Soy re provacunas», justificó el diputado electo y aclaró las idas y vueltas sobre su decisión de no inocularse antes.
El diputado electo por «La Libertad Avanza», Javier Milei, confirmó que recibió las dos dosis de la vacuna contra el coronavirus de Sinopharm, pese a que durante la campaña electoral había planteado su desconfianza en la inmunización.
«No soy antivacunas, soy re provacunas«, sostuvo este lunes en declaraciones a La Nación, luego de que se difundiera por redes sociales una imagen en la que recibe la inyección en la brazo izquierdo.
Y salió al cruce de las acusaciones: «Aquellos que me tildaron como antivacunas quedan expuestos como mentirosos y quieren cargar el tema (de la vacunación) como una contradicción mía. En esa costumbre de poner todo en formato binario, lo más fácil para la progresía es decir que era un antivacunas».
Además, el economista sostuvo que en su momento prefirió no aplicarse los fármacos porque no integraba los grupos de riesgo y porque fue siempre «un tipo que se cuidó mucho».
«A mis padres, que integran los grupos de riesgo, no les diría ‘pasá de largo’. Les recomendé que se se vacunen porque si se equivocaban, se morían. Yo, si me contagiaba, iba a estar diez días sintiéndome mal», señaló.
Por último, Javier Milei explicó: «Ahora entro en el Congreso, voy a renunciar a mi trabajo, tengo que ir a dar charlas a Uruguay, Estados Unidos, Chile y España, y no puedo entrar sin las vacunas. ¿Qué hago? ¿Me quedo sin ingresos? ¿De qué vivo? Alguien tiene que pagar las cuentas y yo no quiero ser mantenido por nadie».