Argentina

Boliches en alerta: «Si nos vuelven a cerrar nos fundimos todos»

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Los locales bailables estuvieron ocho meses cerrados y recién a fines de noviembre, pudieron abrir en CABA como bares con un aforo del 10%. En territorio bonaerense siguen cerrados. Apuntan contra las fiestas clandestinas y las posibles restricciones nocturnas. 

En la Ciudad de Buenos Aires hay alrededor de 120 locales bailables, mejor dicho había, porque casi un 20% cerró sus puertas o se reconvirtió desde que desembarcó la pandemia. Bajaron la persiana el 10 de marzo y recién algunos, pocos, pudieron volver a reabrir como bares o restaurante a fines de noviembre y principios de diciembre. Todo el sector está preocupado  ante la información que podría haber un cierre de actividades éntre las 23 horas y las 6 horas.

La situación es compleja, después de muchos meses sin actividad, sería un baldazo de agua fría tener que volver a cerrar. Jorge Becco, es el presidente de la Cámara de Empresarios de Discotecas de CABA (CEDEBA), señaló a BAE Negocios: “Recién pudimos abrir a fines de noviembre como bar, nos dijeron que el aforo iba a ser del 30% y a todos nos autorizaron apenas un 10%. Soy el dueño de Club Áraoz que tiene capacidad para 1000 personas y sólo me autorizaron 103. Fueron muy difíciles estos meses, no tuvimos ayuda de ningún tipo, fueron escasos los ATP que recibimos, la Ciudad nos siguió cobrando los ABL que cuesta una fortuna, Edenor no nos bajó la potencia contratada, muy pocos dueños nos bajaron los alquileres”.

La City

Ricardo Fabré dueño de la disco La City tiene capacidad para 940 personas y le habilitaron como restaurante para 94. Señaló a BAE Negocios: “No alcanzamos el punto de equilibrio con 94 cubiertos, por lo menos necesitaría el doble. Abro a pérdida porque los costos fijos son muy altos, pero me ayuda a volver a poner en marcha la estructura y pagarle al personal, además necesitamos estar en contacto con nuestros clientes. Ahora estudian cerrar las actividades de noche cuando los contagios son diurnos porque la gente le perdió el miedo al coronavirus y no se cuida, sino mira La Salada, la zona de Avellaneda y Nazca, el Casino. Para terminar con las fiestas clandestinas tienen que habilitar lugares con controles estrictos. Nosotros cumplimos todos los protocolos “.

No todos los locales bailables del país fueron autorizados a abrir, por ejemplo en la provincia de Buenos Aires no pueden abrir ni como bar. Para unificar la problemática de realidades distintas en un mismo sector nació en plena pandemia IDEAR, la cámara de la Industria del Entretenimiento de la Argentina que agrupa a discotecas, salas de recitales y productores de eventos de todo el país. Aseguran que son 400 empresarios que representan a 1000 establecimientos que dan trabajo a 100.000 personas en forma directa e indirecta.

Toque de queda nocturno

Eduardo Sempe, vicepresidente de IDEAR, señaló a BAE Negocios“Un 30% de los locales bailables y salas de recitales de todo el país no volverá a abrir. Sumado a que en los últimos años, ya cerró el 20%. En CABA sólo nos autorizaron a abrir como bar a una capacidad del 10%. No nos permiten que bailen ni shows en vivo, nada. Soy dueño de  Palermo Club y Groove abrí y tuve que volver a cerrar, hasta que algo cambie es un negocio inviable. Son muy restrictivos con  nuestra actividad, nos estamos fundiendo todos. Si nos permitieran abrir, las fiestas clandestinas no existirían, nosotros ofrecemos cumplir el protocolo, trazabilidad y en esas fiestas nadie los controla, ya murió un chico electrocutado en Corrientes y hay varios apuñalados. ¿Quién se hace responsable de las fiestas clandestinas?”.

Apenas comenzó a circular la información que el presidente Alberto Fernández analizó con gobernadores restringir la circulación de 23 a 6 horas, el sector se puso en alerta roja. Jorge Becco de CEDEBA fue directo: “Si nos llegan a volver a cerrar nos fundimos todos porque ayuda no tenemos. Cumplimos todos los protocolos distancia, barbijos, no nos dejan que la gente baile mientras florecen las fiestas clandestinas que están provocadas por el mal manejo del Gobierno de la Ciudad y la provincia de Buenos Aires y el Gobierno nacional”.

En representación de los locales bailables de todo el país, Eduardo Sempe de IDEAR advirtió a BAE Negocios: “En vez de restringirnos a nosotros que trabajamos en forma prolija y cuidamos a la gente, deberían perseguir a los responsables de las fiestas clandestinas. Si nos vuelven a cerrar presentaremos un recurso de amparo. Fuimos la primera actividad que cerró y somos la última actividad que pudo abrir y ni siquiera en condiciones normales. No dejan que la gente baile al lado de la mesa, mientras hay cientos de fiestas clandestinas con gente bailando”.

Después de estar ocho meses con los locales cerrados, están desesperados. Son un sector, que aunque no parezca da mucho trabajo a Dj, iluminadores, personal de seguridad, bomberos, médicos, especialistas en video y personal de maestranza. Enojadísimos con las fiestas clandestinas, están listos para presentar batalla, si los vuelven a cerrar.