Sociedad

Encontraron una carta de 1969 con predicciones (muy precisas) sobre el futuro

Comparte:

La carta escrita por una estudiante hace más de 50 años fue escondida en el respaldo de un sillón con predicciones sobre el futuro.

Rosa Beckerton y su pareja Peter encontraron escondida en el respaldo de un sillón una carta con fecha de 1969 escrita por una estudiante. La nota escrita hace 50 años es anónima pero tiene tiene muchas predicciones sobre el futuro. La pareja estaba remodelando el mueble cuando encontró la reliquia.

El papel tiene fecha del 23 de febrero de 1969. Según sus deducciones parece escrita por una chica de 11 años que imaginaba como sería la vida en 1980. Aunque la carta tiene algunas fantasías inverosímiles, la joven no estaba muy equivocada con otras predicciones. La menor parece haber adivinado cómo sería hablar por videollamada.

Ella escribió: “En 1969, el teléfono era una caja cuadrada pero puedes ver a la gente con la que estás hablando, porque hay una pantalla donde puedes ver a la gente. Es un poco como una televisión”.

Encontraron una carta de 1969 con predicciones (muy precisas) sobre el futuro
Encontraron una carta de 1969 con predicciones (muy precisas) sobre el futuro

La mujer contó que su esposo es tapicero. “La encontró en el costado de un sofá que estaba tapizando para un cliente”, reveló. Y añadió: “No tenían idea de que estaba allí. Fue realmente sorprendente”.

La nota tenía varias correcciones, lo que da indicio que podría haberse tratado de una actividad escolar. “Fue tan interesante, porque mirándolo hoy, tiene muchas de sus predicciones correctas, pero en su forma infantil e inocente pensó que todo sucedería en diez años”, contó la mujer.

Encontraron una carta de 1969 con predicciones (muy precisas) sobre el futuro
Encontraron una carta de 1969 con predicciones (muy precisas) sobre el futuro

El comienzo de la carta dice: “El año es 1980, la hora es el polvo de la luna y media. Aquí tengo veintiún años, sentada en un colchón de aire. Hay una caja cuadrada con perillas delante. Ahora es una pantalla grande con perillas en el brazo de la silla para encenderla y apagarla”.

Y continúa: “Estoy casada y trabajo en un banco, lidiando con el dinero. Siempre he querido ser asistente de banco”. Sobre el final, se lee: “Realmente, cuando pienso en esos diez años, las cosas han cambiado enormemente“.

Fuente Mitre.