El emocionante episodio ocurrió en Neuquén. Para agradecerle por su esfuerzo, el dueño de una cristalería decidió premiar a quien trabaja con él desde hace 5 años y organizó un encuentro secreto, que terminó a puro abrazo y emoción.
Sin lugar a dudas que la pandemia del coronavirus (orthocoronavirinae) trajo consigo una fuerte crisis y una caída de ventas de casi todos los rubros, pero inclusive en tiempos así, hay argentinos que sorprenden y son noticias por su generosidad.
Esto fue lo que pasó con Eduardo Fonseca, en Neuquén, que le regaló un auto a Franco Núñez, a quien conoce desde hace una década y que es su empleado en la vidriería desde hace 5 años.
Todo nació cuando Fonseca acompañó a Núñez a ver un vehículo que quería comprar. «Yo le pinché el globo, le dije que estaba algo podrido, que no le convenía y ahí se me ocurrió», explicó.
«Yo conocía su deseo de comprarse un auto. Nunca había tenido uno. Así que me puse en campaña para conseguir uno», añadió.
Entonces, el joven de 27 años destinó el dinero ahorrado a materiales de construcción para su casa, mientras su jefe decidió que iba a obsequiar un auto a su trabajador y se puso a chequear variantes.
Cuando encontró el Fiat Duna no lo dudó, «estaba lindo y en buen estado mecánicamente, así que lo compré». Fue ayer, feriado nacional, cuando ejecutó la compra y citó a Núñez y a su familia al local.
Cuando llegaron a la vidriería, las luces estaban apagadas y las prendieron bajo el grito de “sorpresa”. “No te lo puedo creer”, respondió Núñez, como se pudo ver en un video que se hizo viral en las últimas horas.