Un perro weimaraner logró superar sus ataques de ansiedad gracias a la ayuda de su pequeño hermano, un perro salchicha. Hoy los amigos son inseparables.
Los animales son nobles y fieles a sus sentimientos puros. Son capaces de entablar amistades sin importar la especie, el tamaño y el sexo. Como es el caso de Arnold un perro weimaraner y su hermano, un salchicha llamado Frank.
Luego de un traumático encuentro con un pastor alemán, Arnold comenzó a tener ataques de ansiedad cada vez que se encontraba junto a otros animales. Su dueña, Carolyn Manalis de Perth, fue testigo de cómo su amigo de cuatro patas se ponía aún más nervioso y temeroso cuando estaba rodeado de perros grandes que ladraban.
Sin embargo, el weimaraner logró superar sus temores cuando conoció a Frank. Aunque los perros tienen una brecha de un año y una diferencia de tamaño obvia, el perro salchicha rápidamente se convirtió en el mejor amigo de Arnold y lo ayudó a superar sus graves problemas de salud mental.“El vínculo que tienen estos dos perros es increíblemente hermoso. Están muy conectados, se aman y se apoyan mutuamente.
Si alguna vez uno llora, el otro está ahí en medio segundo para comprobar que está bien. Su amor es incondicional, independientemente de su tamaño o raza” comentó la dueña.Carolyn contó que su weimaraner de dos años le enseñó al pequeño Frank todo lo que sabe, ya que ella no pudo darle tanta atención como le dio a Arnold en su momento.
“Arnold le enseñó a Frank cómo ladrar a los intrusos, cómo perseguir una pelota, cómo pararse para que le pongan el collar y la correa, cómo sentarse y esperar antes de cruzar la calle, entre otras cosas. Dondequiera que camine Arnold, Frank lo seguirá ” dijo Carolyn.