El delincuente está debidamente identificado y la Policía intervino en las denuncias, pero este individuo sigue apareciendo en el comercio para robar y lo hace cada vez de manera más violenta. Los responsables del lugar sienten impotencia y quieren evitar tomar justicia por mano propia.
Pucheta comete los robos con total impunidad, a plena luz del día y en una zona donde se supone que es segura.
RIO GRANDE.- En lo que va del año cuatro veces el kiosco “Futurama”, local comercial ubicado en calle Posadas 841 casi esquina Liniers, fue blanco del robo perpetrado por una misma persona identificada como Ezequiel Pucheta, quien fue denunciado en todos los hechos, con intervención judicial, pero con total falta de respuestas hacia las víctimas.
Los propietarios del local expresaron su impotencia por los hechos que se sucedieron en este tiempo, los que fueron de menor a mayor porque comenzaron con un simple caso de hurto hasta llegar a ser robos violentos, con el uso de arma y elementos contundentes, amenazando a los empleados.
En diálogo con El Sureño, uno de los responsables del comercio confesó que “nos sentimos indefensos y sin respuesta de quien sea, de la Policía, de los fiscales o de los jueces. No queremos que esto termine en algo que debamos lamentar. No queremos que termine en un caso de justicia por mano propia”.
Lo llamativo de todo es que Pucheta comete los robos con total impunidad, a plena luz del día y en una zona donde se supone que es segura, ya que a metros existe un destacamento de bomberos y está la oficina del Instituto Provincia de la Vivienda. Además, existe una importante actividad comercial.
El último robo sucedió este lunes 17 de agosto en momentos que Ezequiel Pucheta apareció a las 11:30 en el kiosco, munido de un caño de gas de color amarillo, con el cual amenazó de muerte al empleado a quien increpó por supuestos daños ocurridos en el vidrio de su auto. “Pagame los vidrios del auto. Te voy a romper todo, a vos y a tu jefe. Te voy a matar”, dijo el delincuente, mientras le pegaba con el caño.
Pucheta después sacó una navaja con la cual intimidó aún más al empleado y le pidió toda la plata de la caja registradora. Ante este acto violento la víctima decidió esconderse en la zona del baño, desde donde solicitó auxilio llamando al 101 y comunicando lo sucedido al dueño del local comercial.
Antes de la llegada de la Policía el ladrón pudo darse a la fuga en su automóvil, a pesar que fue seguido por otros comerciantes que vieron lo sucedido y que intentaron impedir la fuga. “Casi se produce un linchamiento”, relató uno de los responsables del negocio afectado.
Este caso fue debidamente denunciado ante personal policial de la Comisaría Tercera, con intervención del Juzgado de Instrucción a cargo del juez Raúl Sahade.
Otras denuncias
Lo sucedido el lunes se suma a otros hechos ocurridos en el kiosco Futurama, en los que participó Pucheta. Uno de ellos fue el 16 de mayo, donde este joven se presentó ocasionando daños en el local y amenazando a los empleados. En este hecho la denuncia recayó en el juez Sahade.
El 10 de julio apareció nuevamente este mismo joven, procediendo al hurto de mercaderías exhibidas en el kiosco y profiriendo amenazas a quien estaba a cargo de la atención al público. La causa judicial se tramita en el Juzgado de Instrucción del juez Daniel Cesari Hernández.
Fuente El Sureño.
